En los casi ocho años de anticipación a los Juegos Olímpicos, los reporteros que ocuparon la ciudad de Río de Janeiro trataron de comprender uno de los aspectos cariocas de más compleja ‘traducción’: las favelas. Entre 2008 y 2016, el volumen de artículos publicados en la prensa internacional haciendo mención de estas comunidades aumentó casi siete veces, para un total de 1094 reportajes.
El periodista Thiago Antunes estaba trabajando en la redacción del periódico popular carioca O Dia el 28 de noviembre de 2015 cuando una noticia interrumpió la madrugada: 111 disparos de rifle y pistola habían sido disparados por la policía militar contra cinco jóvenes en la favela Lagartixa, en Costa Barros, un barrio pobre de la zona norte de Río de Janeiro.
En Venezuela, un país en donde las restricciones a la prensa están a la orden del día y el acceso a la información pública no está garantizado en la ley, estar informado sobre las decisiones del gobierno puede ser problemático. Por eso, el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) Venezuela junto a Transparencia Venezuela están lanzando Vendata, una plataforma en línea que busca ofrecer de manera sencilla la información contenida en la Gaceta Oficial.
Hace seis meses, 50 millones de toneladas de residuos tóxicos de una mina mineral de hierro se derramaron en el río Doce en la ciudad de Mariana en el que se considera “el peor desastre ambiental que Brasil haya visto”, como lo definió la presidenta Dilma Rouseff, según DW. El derrame mató a 19 personas y destruyó el distrito Bento Rodrigues, en el estado de Minas Gerais.
A medida que Río de Janeiro entra en la etapa final de la preparación para los Juegos Olímpicos, los medios de comunicación de todo el mundo intentan entender la ciudad y sus contrastes. Inevitablemente, esto implica adentrarse en las favelas que se encuentran a lo largo de la ciudad y discutir temas como la violencia policial, el desalojo de residentes y el racismo. Pero, también incluye explorar el arte, la música y el espíritu de las personas que viven en las favelas.