Tres periodistas en Venezuela y un bloguero en Brasil están entre los al menos 251 periodistas encarcelados en el mundo por causas de su trabajo.
Elementos de la Policía Nacional allanaron las oficinas del medio informativo nicaragüense Confidencial cerca de la medianoche del 13 de diciembre, y se llevaron equipo de cómputo y documentos, de acuerdo con reportes de la publicación.
El periódico independiente más importante de Venezuela dejará de circular en su versión impresa después del 14 de diciembre y enfocará toda su atención en su sitio web.
Un reportero del estado de Nayarit, México, fue encontrado muerto el 1 de diciembre, convirtiéndose en el primer periodista asesinado durante el gobierno del nuevo presidente Andrés Manuel López Obrador.
En lo que va de 2018, 10 periodistas han sido asesinados en América Latina por organizaciones criminales en represalia por sus reportajes, de acuerdo con un reciente informe de Reporteros Sin Fronteras (RSF).
En los últimos días, al menos siete periodistas independientes de Nicaragua reportaron haber sufrido amenazas de muerte, persecución y acoso de paramilitares, invasiones en sus propiedades, detenciones y arrestos arbitrarios.
El periodista veracruzano Rodrigo Acuña se encuentra en estado crítico luego de ser baleado por desconocidos en la puerta de su casa la noche del 23 de noviembre, en México.
El concejal sospechoso de ordenar el asesinato del radialista Jairo de Souza, muerto en el estado brasileño de Pará el 21 de junio de este año, se entregó a la policía, de acuerdo con la Asociación Brasileña de Periodismo Investigativo (Abraji, por sus acrónimo en portugués).
En México, matar a un periodista es como “matar a nadie”. Así atestiguan los altos índices de violencia contra comunicadores y de impunidad en estos casos. De esta premisa partió el colectivo Reporteras en Guardia, que reúne a 140 periodistas – todas mujeres – en 24 de los 32 estados mexicanos (incluyendo la Ciudad de México) dedicadas a recordar a cada uno de los 176 compañeros asesinados o desaparecidos en el país desde el año 2000 hasta octubre de 2018.
La impunidad de los asesinatos a periodistas en Brasil es algo cada vez más frecuente en el interior del país, de acuerdo con un informe reciente de Artículo 19, "El ciclo del silencio: impunidad en los asesinatos de comunicadores".