Atento a la creciente popularidad de las tabletas, el diario brasileño O Globo lanzó el lunes 30 de enero el primer vespertino digital de Brasil desarrollado para iPad: "O Globo a mais". Con contenido exclusivo, la iniciativa es una señal más del interés de la industria informativa por invertir en nuevas plataformas.
La editora responsable del nuevo vespertino, Adriana Barsotti, reflexionó sobre la primera semana del producto con el Centro Knight para el Periodismo en las Américas. Según ella, la palabra clave para explotar el potencial de los nuevos medios es sinergia y ahora es el mejor momento para experimentar, dada la crisis de los periódicos en el hemisferio norte.
Centro Knight: O Globo ya contaba con una versión digital para nuevos medios. ¿Qué impulsó la creación de un producto con contenido exclusivo para iPad?
Adriana Barsotti: El crecimiento impresionante del mercado de las tabletas. Desde que fue lanzado el iPad, la industria de periódicos lo vio como una salvación. Todavía estamos lejos de alcanzar los niveles de crisis que están viviendo los diarios europeos y estadounidenses, entonces ahora es el momento de experimentar sin la presión de una caída en las ventas. Los periódicos populares vienen creciendo en los últimos años y la circulación de los demás se ha mantenido estable en Brasil. En el caso de O Globo, la situación aún no es de alerta y por eso nos podemos dar el lujo de hacer un producto de nicho. La empresa quiere invertir porque ve las tabletas como una buena posibilidad futura. Pronto vamos a tener una versión de "O Globo a mais" también para Android.
CK: ¿Cómo fue la investigación previa al proyecto? ¿Qué descubrieron?
AB: Hicimos una encuesta a usuarios de iPad en general y usuarios suscritos a la versión digital de O Globo, ya fuera que accedieran al diario a través de un computador o una tableta. El estudio reveló que la mitad de ellos quería un producto con “noticias calientes”, con un resumen de los principales acontecimientos del día, y la otra mitad quería una lectura más analítica y más placentera para relajarse después del trabajo. Procuramos atender esas dos expectativas. Ofrecemos un resumen del día en la sección “Giro”, sin pretensión de contar con todas las noticias y con algunos enlaces hacia el sitio. De los acontecimientos del día, escojemos cuáles son las que valen la pena para tratar desde una nueva mirada. El desafío es formular un producto diferente al sitio web y al impreso.
CK: ¿Tuvieron alguna dificultad en la primera semana?
AB: La principal dificultad es tecnológica. Si ve la tienda de Apple, las mayores quejas están relacionadas con cuánto se demora en descargar la aplicación. Eso no es algo que podamos resolver nosotros. Desde el punto de vista periodístico, no tuvimos ningún problema, al contrario, las personas de la redacción que vieron el producto final se ofrecieron para hacer reportajes, hasta nuestros corresponsales van a producir contenido. La adhesión ha sido alta, superando nuestras expectativas.
CK: ¿Cuántos lectores ya acceden al contenido de “O Globo a mais”?
AB: No tengo todavía ese número, pero sí puedo decir que en este primer mes el número de accesos será bien alto, pues estamos ofreciendo un producto gratuito. A partir del segundo mes el producto será parte de la suscripción digital, vendida con la aplicación de O Globo disponible en la tienda de Apple desde mayo pasado.
CK: ¿Cómo ha sido la recepción de los lectores?
AB: Hemos recibido correos electrónicos de los lectores que dicen que, en general, están bien satisfechos. Algunos incluso comentan que no tenía sentido contar con un vespertino como en el pasado, pues con internet y el tiempo real se puede acceder a la noticia de última hora fácilmente. Entonces esa mezcla de temas “calientes” con temas más analíticos está agradando bastante. El desafío aquí es el equilibrio. Cuanto más caliente son las noticias, menos recursos conseguimos explorar, como una bella edición de video o [la inclusión de] audios, etc. Para una nota pensada para ser cerrada ese mismo día es difícil agregar ese tipo de cosas. Las notas que más sosprenden suelen ser las que fueron producidas con más tiempo.
CK: ¿Es la primera vez que O Globo invierte en un producto orientado a formatos más adecuados y funcionalidades específicas de las nuevas plataformas, como tabletas y dispositivos móviles?
AB: Ya contábamos con aplicaciones temporales, como las relacionadas con las elecciones, la Copa Mundial, las Olimpíadas. Desde que el iPhone llegó a Brasil, nos apresuramos en ofrecer productos de O Globo para iPhone. Veníamos en esa línea, pero esos productos reproducen contenido de Globo.com. A pesar de que hay interfaces diferentes para tabletas y celulares, no había una producción de contenido exclusivos con otros lenguajes, entonces era percibido como una adaptación. La novedad ahora es que por primera vez estamos produciendo específicamente para una nueva plataforma.
CK: ¿Cree usted que el potencial de los nuevos medios todavía es poco explorado por empresas periodísticas cuya tradición viene del impreso, como O Globo?
AB: Creo que la principal dificultad para explotar ese potencial es conseguir intregrar la producción, pues no es posible tener un equipo para cada cosa. Esa sinergia es fundamental. En “O Globo a mais” somos un equipo enfocado en la producción y el cierre, pero tenemos a nuestra disposición material de todas las secciones del diario. En la mañana, cada editor presenta propuestas para nuestro producto. Desde el inicio la orientación es publicar notas más exclusivas primero en “O Globo a mais” y después en el impreso que circulará al día siguiente. También estamos haciendo el camino inverso, con material producido para iPad que vien del diario; es un camino de dos vías. Todos están sacando ventaja del nuevo conenido. Eso forzó un cambio cutural y, en nuestro caso, no hubo resistencia. Ése era uno de los temores, que la redacción no acogiera el proyecto, pero sí lo hizo. La tableta, además de toda la ventaja de internet y el tiempo real, permite una experiencia visual muy agradable, uniendo lo mejor del impreso con lo mejor de internet. Esto resulta en un producto más atractivo.