Por Paola Nalvarte y Travis Knoll
El conglomerado de medios argentino Grupo Clarín anunció hoy que se adecuaría voluntariamente a la controversial ley de medios antimonopolio dividiendo sus licencias audiovisuales entre seis unidades de negocio que respeten el límite que contempla la ley.
Clarín anunció su a propuesta de partición luego de que la Corte Suprema de Argentina declarara constitucional la ley de medios la semana pasada. El gobierno de Cristina Fernández le ofreció al Grupo Clarín la posibilidad de presentar una salida voluntaria de acuerdo a lo que estipula la ley.
Sin embargo, Clarín informó que presentó su propuesta para evitar cualquier apropiación por parte del gobierno y que la implementará solo cuando se vea obligado a hacerlo, reportó AP. En paralelo, el conglomerado de medios argentino continuará litigando para mantener su integridad actual, incluyendo apelar ante tribunales internacionales por considerar injusta la ley.
“Esta adecuación no implica, ni remotamente, la resignación de nuestros principios ni la claudicación de nuestros derechos, que serán defendidos hasta las últimas instancias”, anunció el Clarín a la opinión pública en su comunicado.
En tanto, miembros de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA elogiaron la ley de medios argentina, respaldando las políticas impulsadas por el gobierno de Cristina Fernández a favor de la libertad de expresión y la democratización de los medios, en el marco de una audiencia pedida por periodistas del Grupo Clarín y el diario La Nación. Los periodistas argentinos denunciaron la falta de libertad de opinión de su país ante la comisión.
La Corte Suprema de Justicia argentina declaró la constitucionalidad general de la ley de medios el 29 de octubre, finalizando así el juicio de cuatro años que sostuvo el Clarín contra el gobierno luego de cuestionar los artículos 45 y 161 de la misma.
La ley de medios restringe la posesión de licencias de frecuencia de señal abierta en un máximo de 10, tanto de radio como de televisión, y el manejo de 24 licencias en diferentes localidades para la explotación del servicio de televisión por cable. También prohíbe que una compañía posea ambas licencias, de televisión abierta y de cable, en un mismo lugar.
Actualmente el Grupo Clarín posee 12 licencias audiovisuales, con una diversidad de servicios de radio, televisión de señal abierta y de cable, como Canal Trece y Cablevisión en Buenos Aires, entre otros.
El fallo de la Corte Suprema causó tanto opiniones a favor como en contra, y la división incluso se reflejo a nivel internacional entre los organismos defensores de la libertad de prensa. Por ejemplo, Reporteros Sin Fronteras apoya la ley de medios argentina por promover la pluralidad de voces, pero critica el favoritismo que existe en la distribución de la pauta estatal de publicidad entre los medios simpatizantes con el gobierno.
Por su parte, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) respetó el fallo de la justicia argentina referente a la ley de medios, aunque no estuvo de acuerdo. “Respetamos la resolución de la Corte pero no la compartimos, especialmente teniendo en cuenta el estado de la libertad de expresión en Argentina, deteriorado a raíz de permanentes ataques del gobierno contra las voces críticas e independientes”, declaró Claudio Paolillo, presidente de dicho organismo.
En un reporte del 2012, el Comité para Protección a Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés) concluyó que este enfrentamiento entre el gobierno y la prensa afectó el acceso de los argentinos a información objetiva.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.