Los casos de despido a tres periodistas en Argentina en diferentes circunstancias son una muestra de la “falta de garantías laborales” para que los comunicadores puedan cumplir con su ejercicio en “libertad y sin sufrir represalias”, dijo el Foro de Periodismo Argentino, Fopea, en un comunicado del lunes 25 de marzo.
El más reciente de estos casos se presentó el viernes 22 de marzo en la provincia del Chaco (nordeste del país), cuando el periodista Roberto Espinoza fue despedido después de haber entrevistado para su programa radial al también periodista Luis Gasulla, autor del libro “El negocio de los derechos humanos”. El hecho tuvo repercusión nacional debido a que Gasulla fue amenazado en vivo por dirigentes locales a causa del libro. Por su parte Espinoza, quien fue despedido una vez acabó el programa, escribió en su cuenta de Facebook “prefirieron a los amenazadores, antes que a los amenazados”, reportó Fopea.
El 20 de marzo, Luis Leiva, periodista de una emisora en la provincia de Río Negro (sur del país), fue despedido aparentemente a causa de sus comentarios sobre irregularidades en el uso de fondos públicos. El dueño de la emisora le aseguró a Fopea que la decisión no se relaciona con censura, sino porque el periodista “no obedeció una orden del patrón”, pues él ya le había pedido al comunicador no hacer más comentarios sobre este tema.
Por su parte, en la provincia de San Juan (centro oestes del país) al periodista Ernesto Lloveras le cancelaron su programa radial tras solo tres emisiones al aire. El hecho está relacionado con la llamada que hizo un funcionario del gobierno de esta pronvicia al dueño de la emisora, Adrián Vila, exigiendo la cancelación del programa a cambio de que los otros negocios que tiene Vila con el gobierno no se vieran afectados.
Para Fopea estos hechos no solo preocupan por ser graves ataques a la libertad de expresión, sino porque podrían consolidarse como un “antecedente peligroso respecto de las represalias sobre los periodistas por parte de los dueños de los medios”. Por este motivo la organización considera importante que se apruebe una ley nacional que proteja la cláusula de conciencia de los periodistas, la cual propusieron en junio de 2011.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.