Hace casi un mes, periodistas de 14 medios latinoamericanos comenzaron a planear un proyecto colaborativo para investigar asuntos relacionados a la pandemia del coronavirus. Así surgió Centinela Covid-19, que reúne a organizaciones de 12 países de América Latina, y a Univisión Noticias, de Estados Unidos.
El proyecto de periodismo investigativo es coordinado por el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP) y financiado por Oxfam y Pulitzer Center on Crisis Reporting.
Participan en esta alianza las siguientes organizaciones: Chequeado (Argentina), El Deber (Bolivia), Agência Pública (Brasil), El Espectador y La Liga contra el Silencio (Colombia), La Voz de Guanacaste (Costa Rica), Ciper (Chile), GK (Ecuador), El Faro (El Salvador), No Ficción (Guatemala), Quinto Elemento Lab (México), El Surtidor (Paraguay), IDL-Reporteros (Perú) y Univisión Noticias (Estados Unidos).
De acuerdo con el periodista colombiano Andrés Bermúdez Liévano, uno de los coordinadores del proyecto y editor de CLIP, Centinela Covid-19 definió hasta el momento tres líneas de investigación: impactos sociales, desinformación y compras públicas de insumos médicos. Bermúdez afirmó que ya hay muchas colaboraciones y periodistas cubriendo la crisis del coronavirus y, por eso, la misión de Centinela es complementar ese trabajo – es una alianza que no tiene un tiempo de vida determinado.
“No pretendemos que vamos a explicarlo todo. Simplemente queremos contribuir con información que no estaba sobre la mesa y que ayuda a entender mejor lo que está pasando. Hay periodistas que están haciendo un trabajo muy bueno en temas de coronavirus. Creemos que tenemos esas habilidades y una responsabilidad cívica de sumarnos a eso”, dijo Bermúdez al Centro Knight.
Él contó que una frase, de la periodista Joanne Kenen, editora ejecutiva de salud de POLITICO, fue una de las inspiraciones del proyecto. En un podcast del medio estadounidense, Kenen dijo que percibió en enero el potencial de la cobertura del coronavirus, pero que solo entendió recientemente que esa era "la historia de nuestras vidas".
“Y ella tiene toda razón. Nosotros no somos de salud, no es nuestro beat, pero es imposible no hacer algo sobre eso ahora. Nos pusimos a pensar: ¿cómo podemos nosotros, como periodistas investigativos, contribuir a un mejor entendimiento de esa gran historia de nuestras vidas? Y la respuesta fue: sumando esfuerzos”, dijo Bermúdez.
Enfatizó que la apuesta por el periodismo colaborativo está relacionada con la filosofía del CLIP. "Creemos que trabajando con gente que está en otros lugares podemos conjuntamente unir los puntos. Tú solo no vas a hacer todo el connecting the dots, pero si estás trabajando con otra gente, que tiene otras informaciones, puedes entender mejor el panorama", comentó el periodista.
Asimismo, Bermúdez defendió la perspectiva comparada, que el mostrar casos y medidas de varios países de la región ayuda a los ciudadanos a comprender mejor la situación en su propio territorio. En la alianza, el único medio que no es de América Latina es Univisión Noticias, que va a investigar los mismos temas en EE.UU., en los estados con mayor población latina.
El 17 de abril, Centinela Covid-19 publicó su primer reportaje, sobre las informaciones con que no cuentan los gobiernos de la región o que están ocultando sobre la pandemia. La cofundadora y editora del medio digital El Surtidor, Jazmín Acuña, dijo al Centro Knight que ese reportaje fue importante para ayudar a evaluar la actuación de Paraguay.
“Yo no sabía que hay países que están dando informaciones a nivel municipal sobre el estado de los contagios, acá solo tenemos información del gobierno central. Tampoco sabía que había una diferencia entre la cantidad de pruebas que se realiza y la cantidad de pruebas que se procesan. En nuestro país sabemos la capacidad de procesamiento de las muestras pero no sabemos cuántos test se están realizando”, explico Acuña.
La periodista afirmó que ese intercambio de informaciones le permitió tener más elementos para exigir medidas por parte de las autoridades. Javier Quintero, reportero del medio mexicano Quinto Elemento Lab, concuerda.
"En muchos países se está ocultando información o esta está tan dispersa que no se ha logrado unificarla. Vemos el caso de México, que hasta hoy no tiene el número de camas disponibles en las unidades de cuidados intensivos en los hospitales. No se sabe la tasa de ocupación", contó al Centro Knight.
Esa información es esencial para que la población entienda que la situación es muy grave y requiere la ayuda de todos, sostuvo Quintero. "Si el gobierno le dice a la población que la cifra de camas es mínima para toda la emergencia que estamos por ver los próximos días, probablemente la gente se prepare, haga un poco de consciencia, se quede encerrada en casa. Y así obviamente hay una medida sanitaria, de protección, que pudiera resultar más efectiva", explicó Quintero.
Al mismo tiempo, la colaboración es importante, según Acuña, para llegar a algunas fuentes. "Nuestros colegas de CLIP tienen acceso a ciertas fuentes calificadas. Ellos nos ayudaron sobretodo a hacer las conexiones que cuando trabajas solamente a nivel local es prácticamente imposible de hacer”, dijo.
De acuerdo con Acuña, la alianza también ayuda a interpretar información que podría parecer inconexa o irrelevante, pero que llegan a tener sentido cuando se complementan con datos de otros periodistas, por ejemplo. Y la colaboración vuelve más fácil la organización del trabajo. "A veces es difícil encontrar el foco habiendo tantos temas que cubrir. Nos animamos a seguir líneas de investigación que de otra manera no nos animaríamos. O nos costaría mucho más a hacerlo solos", comentó.
Uno de los focos del proyecto es investigar las compras de insumos médicos y medicamentos por parte de los gobiernos de la región. Acuña afirmó que ese mercado es complejo e internacional, y muchos países pueden recurrir a las mismas empresas y proveedores. "Es difícil monitorear y entender cómo funciona la industria farmacéutica y de los laboratorios, y solo con el esfuerzo de varios medios es posible hacer un trabajo más efectivo de investigación", sostuvo.
Quintero citó el ejemplo del anuncio del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, respecto de que EE.UU. va a enviar mil ventiladores mecánicos al país vecino. "¿A cambio de qué? No lo sabemos. No sabemos por qué Estados Unidos, que es el epicentro de la pandemia, ha decidido vender o traspasar al gobierno mexicano más de mil respiradores. Yo que no tengo esa información, se la puedo pedir a esta compañera que tenemos allá en EE.UU., de Univisión, y trabajar juntos", afirmó.
Para Quintero, una de las grandes diferencias de Centinela Covid-19 es la profundidad de los reportajes, que muchas veces son inviables en redacciones cada vez más pequeñas y ya sobrecargadas con la cobertura diaria del coronavirus.
"El proyecto Centinela es lento, porque estamos investigando muy, muy a fondo lo que está pasando. En esa búsqueda diaria de noticias es difícil que los medios más tradicionales puedan concentrar en un trabajo de profundidad", afirmó.
Acuña destacó también el legado, la visibilidad y el respaldo que la alianza brinda al contenido y a la marca de un medio pequeño. "Para nosotros es una oportunidad de aprendizaje. Somos un medio relativamente nuevo, con cuatro años de existencia, estamos ganando muchas herramientas que van a quedar en nuestra organización al hacer parte de una colaboración como esta. Y por ser un medio emergente, para nosotros es muy importante contar con el aval y el alcance de la red", dijo ella.
Otro legado para los medios pequeños es el financiamiento, que es utilizado para apoyar a la red y, principalmente, a sus miembros más vulnerables. "Hay medios de Centroamérica que no tienen los recursos humanos y físicos que los demás. Vamos a ayudar a varios de esos medios más pequeños y que están en mayores dificultades", dijo Bermúdez.