Las protestas y crisis que generó la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela de suspender las facultades de la Asamblea Nacional en la noche del miércoles 29 de marzo, ha dejado una vez más a la prensa en su posición más vulnerable: agentes de las fuerzas de seguridad han agredido a reporteros que cubrían las protestas, según han denunciado.
El caso que tuvo más repercusión fue el ataque en contra de Elyangélica González, corresponsal de Caracol Radio de Colombia, quien transmitía en vivo para el medio colombiano sobre una manifestación de estudiantes a las afueras del TSJ.
En directo a Caracol Radio la periodista se encontraba narrando un intento anterior de desalojo del lugar por parte de grupos pro gobierno quienes habían amenazado a periodistas y manifestantes, según relató.
De repente, y en medio de este recuento de hechos previos, se escucha cuando González alza la voz para decir “¡no me voy a retirar, yo soy periodista, no me voy a retirar. Yo estoy acreditada para cubrir a la Canciller de la República, no me quites el teléfono […]!”. A partir de ahí la comunicación se empieza a cortar y el sonido transmite lo que parece un forcejeo.
Además de esta transmisión en vivo, el hecho quedó registrado en un video que circuló por medios y redes sociales. En este se ve como al 10 menos hombres de la Guardia Nacional Bolivariana del país rodean a la periodista que se encontraba sentada en el piso. Posteriormente se ve como algunos la arrastran y la toman por los brazos y piernas hacia un lugar que no se alcanza a ver en el video.
Posteriormente, la cadena radial volvió a tener comunicación con González quien aseguró que había sido golpeada, y que su celular había sido destruido, según el diario El Espectador.
“Estoy completamente arañada, con cabellos en las manos, estoy aruñada, golpeada. Estoy muy triste, esto es una vergüenza. Acá parece que ser periodista es ser un delincuente”, dijo ella según El Espectador. La periodista también le mostró las consecuencias de sus agresiones a los medios.
La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) de Colombia emitió un comunicado en conjunto con Caracol Radio Colombia, la Asociación Nacional de Medios de Comunicación (Asomedios) y la Asociación Colombiana de Editores de Medios Informativos (Andiarios) en el que además de repudiar el hecho por “contradecir los principios democráticos”, pidió a diferentes instituciones pronunciarse sobre el tema.
“Estos hechos no solo son humillantes, autoritarios, crueles e inhumanos contra una periodista mujer, sino que además constituyen una grave violación a la libertad de prensa que cuestiona las garantías para los corresponsales internacionales que cubren la difícil coyuntura que atraviesa Venezuela”, dice parte del comunicado. “Son acciones de censura previa, violencia contra la prensa y destrucción de material periodístico que están prohibidas por las declaraciones internacionales de Derechos Humanos suscritas por el Estado de Venezuela. Este ataque a la prensa colombiana acreditada en Venezuela ya está en conocimiento de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)”.
Las entidades firmantes del comunicado le pidieron a la Cancillería colombiana brindar apoyo a los periodistas en Venezuela que trabajan para medios colombianos, y a la CIDH activar los mecanismos a su disposición para proteger a González.
“Por último, convocamos al periodismo de las Américas a sumar esfuerzos solidarios y de unión con el fin de mantener a la comunidad internacional informada sobre lo que sucede en Venezuela”, finalizó el comunicado.
El Ministerio de Exteriores de Colombia también se pronunció al respecto, según informó Univisión, así como la ONG venezolana Espacio Público.
En conversación con el medio estadounidense Univisión, de donde también es corresponsal González, la periodista aseguró que el Ministro de Comunicación de Venezuela le aseguró que investigará el caso de su agresión.
Otros ataques
El caso de González captó la atención internacional, pero no es el único.
El Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Prensa (SNTP) de Venezuela publicó a lo largo del 31 de marzo varios tweets relacionados con diferentes agresiones, robos y represiones contra periodistas y su trabajo.
Uno de ellos fue el de Marco Bello, de Reuters, quien según el SNTP fue agredido durante los dos días de protestas. También el de Iván Reyes, del medio digital venezolano Efecto Cocuyo, a quien “la GNB lo golpeó en la cara e intentó quitarle el celular” mientras cubría los hechos, según el SNTP.
También reportó los casos de Andry Rincón, un camarógrafo de Vivo Play, quien habría sido golpeado y detenido por la Guardia Nacional. Adiconalmente, la organización denunció que el equipo de Globovisión fue golpeado y robado por parte de la Guardia Nacional.
El Consejo Universitario de la Universidad de Zulia rechazó las agresiones en contra de manifestantes, diputados y trabajadores de los medios. “Deplora este cuerpo la militarización de la vida pública, la censura que afecta el derecho del pueblo a estar informado y las amenazas de grupos armados irregulares al ejercicio de la protesta democrática y pacífica”.
El SNTP exigió a la Fiscalía abrir de manera urgente una investigación en contra de un coronel de la GNB a quien señala como responsable de todas estas agresiones contra periodistas, informó el sitio digital Efecto Cocuyo.
"No es la primera vez que [el coronel] Lugo ordena a los funcionarios a su cargo arremeter contra la prensa. Lo ha hecho antes de las inmediaciones del Consejo Nacional Electoral y lo hace ahora en el Tribunal para ocultar y callar las informaciones sobre las protestas de los últimos días", dijo el secretario general del SNTP, Marco Ruiz, en un comunicado, según Efecto Cocuyo.
El aumento de la crisis en Venezuela
La decisión del TSJ de quitarle y asumir las facultades de la Asamblea Nacional generó de manarea inmediata reacciones a nivel nacional e internacional.
Los dirigentes opositores, como diputados y asambleistas, así como estudiantes protestaron en contra de esta decisión. También se conocieron agresiones en contra de los manifestantes, publicó El Nacional
Incluso la Fiscal General de Venezuela, tradicionalmente chavista, catalogó esta decisión como inconstitucional.
La comunidad inernacional también se pronunció no solo de manera verbal. Perú, por ejemplo, retiró de manera indefinida a su embajador en Venezuela, mientras que Colombia llamó el suyo a consultas, informó BBC Mundo.
La CIDH catalogó la decisión como "una usurpación de las funciones del Poder Legislativo por parte de los Poderes Judicial y Ejecutivo" y urgió al Estado a "restablecer la independencia y separación de poderes del Estado".
El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, pidió de manera “urgente” la convocatoria del Consejo Permanente esta organización, publicó BBC Mundo. Ya el pasado 15 de marzo Almagro propuso que se el Venezuela fuera suspendido de la OEA si no realizaba elecciones generales en un plazo de 30 días, agregó este medio.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.
