“El proyecto de ley, bautizado como ‘Ley de Regulación de Agentes Extranjeros’ y destinado a ‘prevenir delitos contra la seguridad del Estado’, ha levantado un auténtico clamor en la sociedad civil nicaragüense y en la comunidad internacional. El texto, que obliga a cualquier entidad o persona que reciba financiamiento del exterior a registrarse en el Ministerio del Interior como ‘agente extranjero’ y que se aplicará en particular a los periodistas que trabajan para medios de otros países, aún tiene que ser debatido en el Parlamento, donde el partido político del presidente Ortega, el Frente Sandinista, tiene una amplia mayoría.”