Una serie de reclamos públicos entre una asociación de periodistas en Ecuador y el gobierno del país continúa una semana después de que el embajador de Estados Unidos participó en un evento con periodistas durante el Día Mundial de la Libertad de Expresión, el pasado 3 de mayo.
El viernes 10 de mayo, después de que la Unión Nacional de Periodistas pidió al gobierno una disculpa y pruebas para sustentar acusaciones hechas por el presidente Rafael Correa la semana pasada, el Secretario de Comunicación, Fernando Alvarado, defendió los comentarios y aseguró que “la insinuación del Primer Mandatario, lejos de ser una afrenta, constituye un postulado válido dentro del marco de la libertad de expresión”.
El enfrentamiento comenzó cuando la Unión Nacional de Periodistas (UNP) - para celebrar el 3 de mayo - realizó un “acto cívico” que contó con una lona gigante en la que periodistas y ciudadanía en general escribieran frases relacionadas con la libertad de expresión en el país. El evento contó a la presencia del embajador estadounidense, Adam Namm, quien firmó la lona con el mensaje “la única seguridad para todos es una prensa libre” de Thomas Jefferson.
En la cadena nacional del sábado 4 de mayo el presidente Correa criticó la presencia del embajador. “Qué indelicado ir allá, seguramente está financiando” expresó el mandatario. “Pero está bien que el pueblo ecuatoriano los vea juntitos. A los payasitos, a los periodistas payasitos también, y al embajador que al final está financiando. Que sepamos bien dónde está y con quién está esa gente. Que todo el pueblo sepa asumir, sepa identificar qué poderes estamos enfrentando”.
Fueron estas declaraciones las que generaron la petición de rectificación de la UNP.
"El Presidente Correa debería entregar las pruebas de esta insinuación, que para la UNP constituye una afrenta", escribió la UNP en la petición. "La acusación del mandatario se enmarca en su sistemática campaña de desprestigio desplegada a través de cadenas nacionales y de las sabatinas en contra de medios y periodistas, para desembocar en la aprobación de una ley de comunicación restrictiva de los derechos de quienes piensan distinto al gobierno y se atreven a expresarse".
En la respuesta del gobierno a la petición, el Secretario de Comunicación agregó que comparte las sospechas del presidente sobre el posible auspicio que tiene la organización por parte de la Embajada de Estados Unidos y de otros “poderes fácticos contrarios a la revolución ciudadana”. Asimismo, señaló que sería interesante que la UNP hiciera una rendición de cuentas y “transparente sus cuentas”.
En abril de 2011, el Gobierno de Ecuador expulsó y declaró como persona no grata a la embajadora de Estados Unidos debido a un cable de Wikileaks en la que la funcionaria hacía referencia a una supuesta corrupción policial. El embajador Namm llegó en mayo del 2012.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.