El pasado 30 de junio, la alta comisaria de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, criticó la resistencia de Brasil a lidiar con su pasado y la forma en la cual están siendo tratadas las informaciones del Estado, reportó el diario Estado de S. Paulo.
Según la Organización de las Naciones Unidas , Brasil violará sus obligaciones internacionles si no logra garantizar el acceso a los archivos de la dictadura a las víctimas de tortura, informó la revista Isto É. La ONU también se mostró descontenta con la falta de transparencia del gobierno y dijo que pedirá a las autoridades que reconsideren su posición sobre la amnistía a crímenes del pasado y el cierre de archivos.
Para Pillay, las autoridades estarían ayudando a "enterrar evidencia" de los crímenes ocurridos durante la dictadura brasileña. Las declaraciones de la comisaria ocurren en momentos en que Brasil debate el proyecto de ley de acceso a la información pública, actualmente en el Senado. La votación de la iniciativa ha sido pospuesta en repetidas veces ante la falta de acuerdo entre el gobierno y sus aliados como los ex presidentes Fernando Collor y José Sarney.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.