Así como en la vida, lo único constante en el periodismo ha sido el cambio. Los avances tecnológicos a lo largo de los años han modificado el perfil del periodista. La imagen del periodista como lobo solitario, con su máquina de escribir y su libreta en la mano ha quedado atrás y se ha dado paso al perfil de un profesional multifacético que puede escribir, tomar fotografías, editar vídeo, grabar audio y hasta programar.
Aprender a escribir código parece ser una habilidad crucial para los periodistas en las cada vez más digitalizadas e integradas salas de redacción. El conocer sobre lenguajes como Java, Python, HTML o R permite a los periodistas el desarrollo de páginas web o aplicaciones, el manejo y análisis de grandes bases de datos, y la creación de visualizaciones interactivas.
Un sin fin de plataformas de aprendizaje ofrecen cursos de programación para periodistas. En el último curso del Centro Knight sobre el lenguaje de programación estadística R más de 3.300 estudiantes de 131 países se inscribieron y por la alta demanda se abrió un curso más avanzado que comenzará en septiembre.
Tomando lo anterior en consideración, desde LatAm Journalism Review (LJR) se decidió entrevistar a periodistas, y otros profesionales de medios de comunicación en Latinoamérica, para contestar a la pregunta: ¿Es vital que un periodista en la actualidad aprenda a programar?
La periodista española Lydia Aguirre escribía, en el año 2015, en su blog dando respuesta a la pregunta planteada. Según Aguirre, un periodista no debía necesariamente aprender a programar, pero sí tenía que saber pensar en código. “Pensar en código no es más que entender cómo funcionan las plataformas que utilizamos a diario para publicar y distribuir los contenidos que generas, de manera que puedas sacarle el máximo provecho. Conocer unos principios básicos que te permitan dialogar de manera más eficiente con el equipo técnico (desarrolladores, diseñadores, expertos en SEO, analistas de audiencia…) Pensar como piensan las máquinas, conocer las estructuras, formatos y procesos del gestor de contenidos de tu medio te permitirá ahorrar un tiempo precioso y ahorrarlo a tus compañeros del equipo técnico”, escribía Aguirre.
Varios de los periodistas y profesionales de la comunicación entrevistados por LJR coinciden con esa premisa. Flavio Vargas, periodista colombiano y experto en comunicación digital, no habla de la obligatoriedad sino de lograr una comunicación entre el trabajo de un desarrollador y el periodista. “Estaría bien que tuviera algún grado de alfabetización digital, incluyendo lo necesario para comprender lo que hace un desarrollador en relación con el trabajo periodístico”, dijo Vargas a LJR.
Por su parte, el diseñador gráfico argentino Andrés Snitcofsky, quien se ha dedicado a la visualización de datos y distintas ramas de la comunicación visual, dice que no hay que caer en el hype de que todos los periodistas deben necesariamente aprender a programar. “Más bien los periodistas deben entender la programación, cómo funciona, cómo hablar con los programadores y cómo alimentar con datos lo que hacen. Si todos aprendemos todo, entonces nadie sabe nada. Es como el arquitecto que no tiene porque saber cómo construir una casa literalmente, pero sí entender cómo son los procesos”, explicó Snitcofsky a LJR.
“Creo que se debería pensar más en eso. Se podrían crear cursos para entender la programación, no necesariamente para aprender a programar. No tiene sentido que queramos ser todos un one-man-band”, agregó el diseñador.
Snitcofsky ha trabajado en proyectos periodísticos de visualización como Cargografías o Economía Feminista donde ha sido básico que las diferentes disciplinas que trabajan en el equipo (diseño, programación, periodismo) se entiendan y comuniquen asertivamente.
Los entrevistados para este artículo coinciden que más que aprender a programar un cierto lenguaje, se trata de estar abiertos y disponibles para seguir aprendiendo destrezas que les permitan hacer un mejor periodismo. “Nuestro oficio nos obliga a estar encima de la bola de los acontecimientos sociales, políticos y culturales, y eso incluye las tecnologías que podemos incorporar poco a poco. Además, vivimos en un mundo donde la forma ya es también contenido, así que no debemos ignorar nada que nos lleve a contar mejor las historias o a analizar más agudamente. Todo esto, claro, sin olvidar lo medular del periodismo: la ética, la empatía, y la responsabilidad social con el manejo y la distribución de la información”, dijo a LJR la periodista puertorriqueña Laura Moscoso, directora de entrenamientos para Investigative Reporters and Editors.
El periodista Paul Steiger en una entrevista habló sobre el modelo adoptado por la agencia de noticias independiente estadounidense ProPublica: periodistas que sepan programar además de reportear. Para Steiger las herramientas digitales o de datos que ahora tenemos son tan fundamentales para la práctica del periodismo como lo fue el telégrafo, la fotografía o la radio en su momento.
Steiger asegura que incluso en las operaciones con datos más complicados que realizan en ProPublica se trabaja con especialistas que tienen un pensamiento periodístico. Así que el periodismo y la programación se complementan en esa sala de redacción.
Es importante tomar en cuenta que ProPublica es un ejemplo exitoso de periodismo de investigación donde el trabajar con grandes cantidades de datos y visualizar los hallazgos es crucial. Algunos de los consultados para este artículo explican que el decidir aprender o no programación va a depender mucho del enfoque periodístico que se quiera seguir.
“No creo que sea necesario saber programar. Quizás te puede ayudar a hacer algunos trabajos de forma freelance, pero la programación es una carrera muy densa. Yo trabajo con mercadeo digital y tengo un equipo aliado al que le delego esa necesidad de mis clientes”, explicó a LJR el periodista y fotógrafo venezolano Ángel Rivero.
Así que quizás si el enfoque del periodista es convertirse en un fotoreportero, un ancla de televisión o en un gestor de redes sociales, la programación no parece ser muy necesaria.
En ello coincide el periodista independiente en Londres, Daniel Cappa, quien asegura que la programación es útil pero no vital en el ámbito periodístico. “La programación puede ir desde el scrapping (técnica para extraer información de sitios web) hasta desarrollo web, análisis estadístico, visualización de datos y front-developing. Saber programar quizás te dé nuevas oportunidades de trabajo como analista de datos o desarrollador, pero esos puestos no necesariamente son periodismo. El periodismo sigue siendo reporteo, contraste de fuentes, contexto, etc.”.
Cappa se especializó en periodismo de datos y ha estado aprendiendo los lenguajes de programación R y Python. Sin embargo, no se atreve a decir que sabe programar porque le resulta un trabajo complejo y difícil donde todavía necesita mejorar.
¿Y qué opinan los desarrolladores sobre cada vez más periodistas aprendiendo código? También se le intentó dar respuesta a esta pregunta. En este caso, afirman que aprender a programar no es una tarea fácil y que requiere tiempo y dedicación.
“El saber programar le va abrir nuevas oportunidades de trabajos a los periodistas pero va a depender también de cómo quieran enfocar su carrera. Grandes medios digitales dentro y fuera de los Estados Unidos están enfocando cada vez más sus reportajes en visualizaciones y análisis de datos, los cuales requieren en cierto grado un conocimiento en programación”, dijo a LJR Raúl Echezuria, analista de datos y desarrollador visual venezolano. “Eso sí, hay que ser claro y no es para asustar a nadie, pero la programación no es fácil. Hay que ser resiliente a las frustraciones porque la curva de aprendizaje es empinada”.