Aunque no es el común denominador, cada vez son más las iniciativas que buscan promover la diversidad en las redacciones de Latinoamérica. Algunos de estos proyectos que impulsan la diversidad, equidad e inclusión (DEI) fueron presentados en el cuarto panel de la Segunda Conferencia Latinoamericana sobre Diversidad en el Periodismo.
Esta conferencia se llevó a cabo el pasado 9 y 10 de septiembre y fue organizada por el Centro Knight para el Periodismo en las Américas, con apoyo de Google News Initiative. En el canal de Youtube del centro se puede ver la grabación del evento.
El panel titulado “Nuevas narrativas, productos e iniciativas que impulsan la DEI en el periodismo latinoamericano” tuvo como moderadora a Lucia Solis, periodista y comunicadora feminista (Perú) quien se sintió “honrada de formar parte del clamor por la diversidad,” junto a los periodistas Pilar Cuartas (Colombia), Florencia Aza (Argentina), David Adrián García (México), Majo Muller (Argentina) e Isabela Ponce (Ecuador).
Para los panelistas la diversidad puede ser impulsada tanto desde medios tradicionales como de los independientes, siempre que se haga con rigurosidad. “El periodismo va detrás de la verdad y mostrar la verdad es mostrar también las diferencias. El mundo está lleno de personas distintas, por suerte, y nuestro trabajo es mostrar esa diversidad”, dijo Muller.
A continuación un resumen de los proyectos presentados por cada uno de los ponentes.
Pilar Cuartas es la coordinadora de género y diversidad de El Espectador. Este medio colombiano tiene varios años explorando y dando espacio a temáticas sobre diversidad sexual y feminismo pero apenas hace unos meses fue que se creó esta sección de manera oficial.
El equipo de base de la sección de género y diversidad son tres personas pero en los proyectos Igualadas (enfocado en derechos de las mujeres) trabajan más de 11 mujeres y en La Disidencia (enfocado en diversidad sexual y comunidad LGBT+) colaboran más de seis periodistas
“Se han convertido en espacios autónomos y participativos de El Espectador”, dijo Cuartas durante su participación en el panel. Sin embargo, el proceso de formación de equipo no ha sido fácil.
“Para mí ha sido difícil encontrar a periodistas LGBT+ que quieran enfocarse a escribir sobre temas de diversidad sexual. A pesar de que la experiencia personal se convierte en un insumo fundamental vital cuando se ejerce este tipo de periodismo”, contó Cuartas.
Según Cuartas, esto se debe muchas veces a que los periodistas no quieren ser estigmatizados por formar parte de una comunidad u otra.
Tanto las Igualadas como La Disidencia hacen uso del lenguaje multimedia para conectar con sus audiencias. Cuartas, quien tiene experiencia previa haciendo reportajes de largo aliento, opina que “el periodismo de investigación debe bajar su arrogancia frente a los nuevos formatos y entender que el lenguaje hoy en día es importante. De nada sirve tener una investigación sumamente elaborada si al momento de presentarla es un lenguaje denso, ladrilludo, que solamente es periodismo hecho para periodistas y no para las audiencia que la necesitan”.
La periodista argentina Florencia Aza presentó durante el panel el Programa METIS de Sembramedia, una organización que lleva más de siete años ayudando a medios de Latinoamérica a crear sus modelos de negocio y ser sustentables.
Este programa, según Aza, busca empoderar el trabajo de las líderes de la región y fortalecer una red donde encuentren un espacio de acompañamiento.
“El programa METIS lleva cuatro años realizándose, se han celebrado cuatro ediciones de seis meses de mentorías cada una. Esto incluye el apoyo a 39 mujeres fundadoras y más de 1700 horas de mentoría”, dijo Aza. “Más que prestar un conocimiento técnico hay un acompañamiento para que las fundadoras no se sientan solas”, complementó la periodista.
Según Aza, este tipo de proyectos son importantes para mejorar la representación y romper con la desigualdad porque a las mujeres “nunca se nos enseñó a hablar de dinero”.
David Adrián García, directore de Altavoz LGBT+, presentó su iniciativa que empezó como una newsletter en 2021 y hoy en día es un portal periodístico.
Los periodistas de Altavoz LGBT+ están en Chihuahua, al norte de México. “El norte del país se caracteriza por mucho machismo, es el segundo lugar con más crímenes de odio a mujeres trans en el país. Así que vimos necesario hablar sobre estos temas”, contó García.
No solo se centran en historias al norte de México sino que se enfocan en contar historias fuera de las grandes ciudades para despegarse de la centralización que caracteriza al país.
Altavoz LGBT+ forma parte de la Coalición Latam, una iniciativa de Factual/Distintas Latitudes, que según su página web, busca impulsar el crecimiento de medios fundados por jóvenes periodistas, así como agregar valor a los contenidos y a las audiencias. Su proyecto colectivo más reciente fue Cultivar, distribuir y comer: la ruta hacia la soberanía alimentaria, una investigación contada desde las experiencias de mujeres y personas de las poblaciones
“La idea es que las historias de las personas de la LGBT+ se cuenten y se cuenten bien. La idea no es darles voz, sino darles la oportunidad de contar sus historias”, dijo García.
GK es un medio ecuatoriano fundado en 2011 y que actualmente se encuentra entre los 10 medios más leídos del país. Su directora editorial, Isabela Ponce, explicó que desde la redacción buscan generar reportajes de investigación con perspectiva de género que tengan impacto.
“Nuestra apuesta es tener la rigurosidad del periodismo de investigación en temas de género para hablar de problemas más estructurados, sin olvidar que no son casos aislados”, dijo Ponce.
Desde GK se describen como un medio con enfoque de género y derechos humanos que escriben para públicos no convencidos. “Con no convencidos nos referimos a personas que no entienden mucho sobre el tema pero igual intentamos llegar a ellos”, explicó Ponce.
Ponce también habló de la importancia de la publicación como reparación y de escribir esas historias que tienen un impacto en las víctimas y supervivientes. Puso como ejemplo los reportajes: Un fuerte militar, flanqueado por la indisciplina y una acusación de violencia sexual; y La rutina del terror.
Para Ponce “lo clave es mantener la rigurosidad periodística al tocar estos temas que pueden ser tan o más graves que otros”.
Más Miradas es un proyecto de Fopea, con el apoyo de Google News Initiative, que busca dar oportunidades a jóvenes que tienen vocación periodística en barrios populares en la Argentina.
A su vez, el proyecto busca enriquecer los medios con otras miradas. “Los medios masivos no reflejan la verdad de los barrios populares. Muestran una realidad que tiene que ver con la marginalidad y que solo representa a un porcentaje mínimo de quienes viven en esos barrios”, contó Majo Muller, impulsora de Más Miradas.
Esta iniciativa nace de una investigación de Fopea titulada “Desiertos informativos” que buscaba mostrar las áreas en Argentina en donde el ejercicio del periodismo profesional es muy débil.
Al ver la enorme cantidad de desiertos informativos existentes, y notar que además los otros medios no representan las realidades, se decidió capacitar a más de 20 chicos de barrios populares en la Argentina durante 3 meses, a cargo de destacados profesionales del ámbito periodístico.
“La voces de los más vulnerables están silenciadas y otros hablan en su nombre y arrastran estigmas, estereotipos y mitos denigrantes”, explicó Muller.
Este panel terminó con unas reflexiones finales de todos los asistentes sobre la búsqueda de recursos al momento de hacer investigaciones. Todos coincidieron que el financiamiento debe ser parte de la planificación antes de crear un medio.
También se habló sobre las posibles soluciones efectivas para impulsar la diversidad dentro de las redacciones de Latinoamérica.
“Creo que lo primero que hay que hacer es formar a los periodistas”, dijo Pilar Cuartas. “Tenemos una falta gigante de capacitación. En la facultad de comunicación jamás me hablaron de diversidad Y tampoco en la carrera conseguí a un editor o editora que me hablara de hacer periodismo desde un enfoque de derechos humanos, diversidad, género. El cambio debe empezar en el interior de las redacciones”.