“En 2022, América Latina era la región más peligrosa del mundo para ejercer el periodismo. Según datos de diferentes ONG, entre 30 y 42 periodistas fueron asesinados ese año. Aunque todavía no hay cifras oficiales para 2023, el panorama no es muy diferente: La UNESCO afirma que 69 periodistas de diez países fueron asesinados en la región entre enero de 2022 y julio de 2023. Más que en Ucrania o Siria, países en guerra.
El problema no son solo los asesinatos: Los periodistas sufren violencia no letal, amenazas, precariedad laboral, encarcelamientos y se ven obligados a vivir en el exilio. Países como El Salvador, Nicaragua o Cuba son agujeros negros para la libertad de expresión debido a sus regímenes autoritarios, que hacen casi imposible ejercer el periodismo. En otros países, como Brasil, Colombia o Perú, además de las amenazas a los periodistas que cubren la corrupción y el crimen organizado, también sufren la violencia quienes informan sobre comunidades indígenas, cuestiones medioambientales o migraciones.”
Leer el informe original (en inglés) de Mael Vallejo, vicepresidente de contenidos de Capital Digital (México). El informe es parte de las Predicciones del NiemanLab para el Periodismo en 2024.