Actualización (nov. 15, 2018): Manuel Durán Ortega, periodista salvadoreño con base en Memphis, Tennessee, recibió una suspensión de deportación por un periodo de dos semanas mientras el Undécimo Circuito de la Corte de Apelaciones de los Estados Unidos evalúa su pedido de suspender de emergencia su deportación, reportó la organización Southern Poverty Law Center (SPLC).
El SPLC, que representa a Durán junto a la organización Latino Memphis, señaló que es "solo una suspensión temporal".
Esta medida de la corte impide que el gobierno pueda deportar a Durán antes del 30 de noviembre de 2018.
"Nos da ánimos que el Undécimo Circuito haya pospuesto la deportación de Manuel por dos semanas tras considerar nuestros argumentos legales", dijo Mary Bauer, directora legal adjunta de SPLC. "Creemos que Manuel enfrenta un grave peligro si es deportado a El Salvador, y si su remoción se da antes de que su caso sea completamente escuchado sería una afrenta a la Primera Enmienda. Dado el peligro y los graves hechos concernientes a su arresto, haremos todo lo necesario para protegerlo, tanto a él como su derecho a la libertad de prensa que está amparado por la Primera Enmienda".
Original (nov. 14, 2018): Un periodista salvadoreño que fue detenido por oficiales de inmigración de Estados Unidos tras ser arrestado durante la cobertura de una manifestación podría ser deportado luego de recibir una negativa de la Junta de Apelaciones de Inmigración (BIA, por sus siglas en inglés).
“Quiero decir que ahora mi situación es un peligro de deportación hacia mi país, cuando sé perfectamente que yo no puedo regresar a mi país, y eso lo he venido diciendo hasta el cansancio y mis abogados lo han dicho hasta el cansancio, que es un peligro que yo regrese a mí país. No debo regresar”, dijo Manuel Durán Ortega a la prensa el 13 de noviembre durante una conferencia telefónica desde LaSalle ICE Processing Center, donde se encuentra detenido.
“Desde el momento en que salgo de mi país, que fue por persecución, por amenazas, por el trabajo que desarrollaba como periodista, salí pensando, y lo creí así con certeza, que Estados Unidos era el país correcto para poder desarrollar mi profesión, por ser un país que respetaba el derecho a la información, el derecho de prensa, y me iba a sentir bien y respaldado haciendo mi trabajo aquí”, añadió.
Durán, propietario y periodista del sitio de noticias en español Memphis Noticias en Tennessee, huyó de El Salvador en 2006 debido a amenazas de muerte, de acuerdo con Reporteros Sin Fronteras (RSF).
El 3 de abril de 2018, Durán fue arrestado cuando cubría una protesta contra las políticas de inmigración de Estados Unidos. El periodista fue acusado de desorden público y obstrucción de vías, cargos que luego fueron retirados y su caso fue cerrado.
Sin embargo, Durán fue entregado al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) el 5 de abril. Desde entonces está detenido.
La organización Southern Poverty Law Center (SPLC), que representa a Durán junto a Latino Memphis, declaró que el periodista fue detenido por ICE “en represalia por sus reportajes sobre temas controversiales relacionados a las fuerzas policiales de Tennessee”.
El SPLC dijo que Durán había reportado anteriormente sobre la policía local y ICE, además de escribir artículos críticos sobre el sistema de detención de inmigrantes.
“El caso de Manuel es parte de un patrón preocupante de ICE, que toma represalias contra aquellos que hablan sobre sus políticas y prácticas”, comentó Michelle Lapointe, abogada sénior de la organización, durante la conferencia telefónica con periodistas.
“Durante estos siete meses y medio no ha sido fácil vivir esta experiencia, segundo a segundo, minuto a minuto, hora tras hora, día tras día, semana tras semana, mes a mes. No ha sido fácil”, comentó Durán. “Desde el momento que se dio mi arresto, le doy vuelta a la situación y me doy cuenta que por hacer mi trabajo estoy ahora pasando una situación bastante difícil, sin embargo, sé que he estado haciendo lo correcto durante todo este tiempo”, agregó.
Resaltó lo difícil que es estar separado de la comunidad a la que ha servido.
Durán contó a los reporteros detalles sobre su detención, durante la cual ha sido trasladado “encadenado como un criminal”, que en los centros la comida es mala, las condiciones higiénicas son precarias y las habitaciones demasiado frías.
En Pine Prairie, en Louisiana, por ejemplo, dijo que estuvieron sin papel higiénico durante dos semanas.
Bryan D. Cox, vocero de ICE, dijo que “todos los centros de detención de ICE están sujetos a inspecciones constantes, tanto programadas como sin previo aviso, y que LaSalle ICE Processing Center siempre ha operado en cumplimiento con los rigurosos Estándares Nacionales de Detención Basados en el Desempeño”.
Añadió que hay múltiples niveles de supervisión para asegurar “ambientes seguros y humanos”.
En abril, los abogados de Durán interpusieron un Hábeas Corpus, el cual les fue negado en septiembre por la Corte Distrital de los Estados Unidos del Distrito Occidental de Louisiana.
La defensa también solicitó la apertura del procedimiento ante una corte de inmigración en Atlanta, Georgia, dijo Lapointe. Según la abogada, en 2007, una corte de inmigración en Georgia ordenó que Durán sea deportado de los Estados Unidos. Lapointe dijo que quieren reabrir el procedimiento de deportación de Durán para que él pueda solicitar asilo, con base en que el periodista nunca recibió la notificación de la audiencia donde se decidió su remoción en 2007, y dado que las condiciones para los periodistas en El Salvador han empeorado.
Ellos apelaron ante el BIA y recibieron una suspensión de deportación en mayo, mientras la junta evaluaba el caso de Durán, explicó Lapointe. Varias organizaciones periodísticas presentaron un reporte amicus curiae señalando cuáles eran las condiciones para los periodistas en El Salvador y los derechos de la Primera Enmienda respecto de Durán y sus lectores, de acuerdo con la abogada. La apelación fue denegada el 17 de octubre.
El 30 de octubre interpusieron un pedido de revisión ante el Undécimo Circuito de la Corte de Apelaciones de los Estados Unidos, así como una moción de suspensión de deportación, dijo Lapointe. Esa moción sigue pendiente.
El principal objetivo del caso es que sea reabierto para que Durán pueda solicitar asilo a través de las cortes de inmigración, de acuerdo con su defensa.
En este momento, la preocupación es la posible deportación de Durán. Lapointe mencionó que la deportación de Durán podría “ocurrir muy rápidamente”; podría suceder en las próximas dos semanas si el Undécimo Circuito no suspende la deportación. Explicó también que en mayo, Durán fue transferido a una instalación temporal en Alexandria, Louisiana, desde donde se intentó concretar su deportación, sin embargo, el BIA suspendió la medida.
Durán continúa reportando desde su detención en Jena, Louisiana. Durante la conferencia telefónica, contó a los periodistas sobre las personas que se encuentran detenidas y sus historias, las cuales espera poder escribir algún día.
El periodista dijo que vino a los Estados Unidos para contribuir.
“Yo no me consideró una persona que ha venido acá, a este país, para restar. Al contrario, siento que he venido para sumar, para hacer grandes cosas para este país.
Durán no es el único periodista latinoamericano que vino a EE.UU. y que está luchando contra su deportación.
El periodista mexicano Emilio Gutiérrez Soto llegó a EE.UU. en 2008 tras recibir amenazas, según dijo, por parte de los militares y que amenazaron con matarlo. Recientemente, Gutiérrez presentó por segunda vez su caso ante un juez de inmigración de Texas y está a la espera de su decisión.