Por Aileen Ford
Sólo en los primeros seis meses de 2015 se registraron 59 ataques contra periodistas en Guatemala, según un informe publicado la semana pasada por el Observatorio de los Periodistas del Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala (Cerigua).
Durante este breve periodo Cerigua, una agencia nacional de información alternativa en Guatemala dedicada al periodismo de investigación y monitoreo público, documentó múltiples tipos de agresiones contra periodistas. Éstas incluyeron amenazas (14), intimidaciones (10), obstrucción a la fuente (6), acoso judicial (3), así como agresiones físicas y verbales, destrucción de equipos y el cierre de medios comunitarios.
Estas cifras fueron publicadas pocos días después de que el 1 de julio Cerigua emitiera una alerta en el que expresaba su preocupación por el aumento del número de ataques contra periodistas durante la semana que acababa de pasar. En 2014, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés) señaló que “la violencia e inestabilidad de Centroamérica provocado por el crimen organizado y la corrupción” permitían que la mayoría de agresiones contra periodistas en países como Guatemala se quedaran sin resolver.
Según las últimas cifras dadas por Cerigua, los ataques registrados contra periodistas se concentraron en los departamentos del suroeste del país como Guatemala (30), Suchitepéquez (9) y Quetzaltenango (4). Los ataques también ocurrieron en los departamentos del norte como Izabal (3), Quiché (3), y Huehuetenango (2). En la mayoría de estos incidentes, las autoridades de Guatemala (12), las fuerzas de seguridad (9), miembros de partidos políticos (7) y sicarios (4) fueron señalados como presuntos culpables.
Asesinato de periodistas genera atención internacional
En el primer semestre de 2015, tres periodistas fueron asesinados en Guatemala. Esto representó un fuerte aumento respecto de 2014, año en que según datos del CPJ no se registraron asesinatos de periodistas por el ejercicio de su profesión. Al contrario, cuatro periodistas fueron asesinados en el país en 2013.
El 10 de marzo de 2015, Danilo López y Federico Salazar fueron asesinados a tiros por desconocidos mientras cubrían un evento oficial del gobierno en el centro de Mazatenango, una ciudad situada en el departamento de Suchitepéquez. El reportero local Marvin Túnchez también resultó herido en el ataque. En ese momento, López estaba trabajando como reportero de Prensa Libre, uno de los periódicos más influyentes de Guatemala, mientras que Salazar cubría noticias y deportes en Radio Nuevo Mundo.
Apenas tres días después, el 13 de marzo de 2015 Guido Villatoro, de 21 años, fue asesinado a tiros mientras entraba a las oficinas de Servicable, un canal local en Suchitepéquez, donde trabajaba como reportero y camarógrafo. Según el diario The New York Times, los investigadores creían que Villatoro fue asesinado porque su empleador se negó a hacer un pago de una extorsión.
Según un artículo publicado por Reporteros Sin Fronteras (RSF), Suchitepéquez es el departamento de Guatemala donde se han registrado los actos más graves contra periodistas en los últimos años. RSF señaló que el 12 de agosto de 2013, el periodista Fredy Rodas escapó de un intento de asesinato en el departamento, al igual que Nery Morales a mediados de febrero de 2014. Sin embargo, una semana después, Carlos Alberto Orellana Chávez fue asesinado allí.
Un funcionario de la Fiscalía de la Unidad de Delitos contra Periodistas del Ministerio Público de Guatemala dijo a la publicación Plaza Pública que justo una hora antes de su muerte, Danilo López había llamado a la oficina para decir que tenía miedo y que el ambiente de la ciudad estaba “muy cargado”, después de recibir amenazas relacionadas con la publicación de artículos críticos acerca de varios funcionarios del departamento.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó rápidamente los asesinatos de los periodistas e instó al gobierno de Guatemala a determinar si el motivo de los crímenes tenía relación con la profesión de los periodistas. La directora general de la Unesco, Irina Bokova, hizo eco de esta preocupación e indicó que “los asesinatos a sangre fría de Danilo López y Federico Salazar no pueden quedar impune”.
Con las muertes de López, Salazar y Villatoro, son siete trabajadores de prensa los que han sido asesinados durante el gobierno del actual presidente, Otto Pérez Molina, de acuerdo a la revista política Americas Quarterly. A pesar de los reiterados llamados al gobierno para que se lleven a cabo investigaciones efectivas y exhaustivas sobre estos asesinatos, Cerigua afirma que la gran mayoría de estos permanecen en la impunidad.
El aumento de la violencia contra los profesionales de la comunicación se presenta en medio de la preparación de Guatemala para las elecciones generales el próximo septiembre. En febrero de este año, el Centro Knight informó sobre el ambiente de miedo e intimidación que afecta la cobertura que la prensa hace de las campañas electorales. Los más recientes ataques contra la prensa demuestran la continúa inseguridad que enfrentan los periodistas de los países del llamado Triángulo del Norte.
Guatemala actualmente ocupa el puesto 124 entre 180 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2015 de RSF.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.