En el primer mes de 2022, América Latina tomó la delantera como la región más letal para la prensa, al registrar siete periodistas asesinados: cuatro en México, dos en Haití y uno en Honduras.
A pesar de ser ampliamente reconocido como un país diverso, Brasil aparece en el informe del Instituto Reuters como uno de los países en donde no hay un solo editor que no sea blanco en la muestra.