La periodista brasileña Bianca Santana presentó el 7 de julio una denuncia ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU contra el presidente Jair Bolsonaro. En total, 19 organizaciones de la sociedad civil suscribieron la denuncia.
“Desde que empezó el gobierno, las periodistas fueron atacadas por el presidente o sus ministros, por lo menos en 54 oportunidades, un número sin precedentes en la historia reciente del país", dijo Santana en la audiencia virtual con la Relatora Especial sobre la violencia contra la mujer, sus causas y consecuencias, de Naciones Unidas, Dubravka Simonovic.
Entre los casos está el de la propia periodista, acusada de publicar noticias falsas durante una transmisión en línea del presidente, el 28 de mayo. Ella había escrito un artículo mostrando las conexiones entre familiares y personas cercanas al presidente, sospechosos en el asesinato de la consejera municipal de Río de Janeiro Marielle Franco y su conductor Anderson Santos.
“A pesar del temblor de mis manos cada vez que escuchaba a Bolsonaro decir mi nombre a sus miles de seguidores, en un primer momento, yo misma me pregunté si no había sido mencionada por error (aunque es grave que el presidente acuse a una periodista de mentir, también por error). Pero es posible notar el patrón sistemático de ataques contra periodistas que puede generar intimidaciones y acabar con la credibilidad de la pregunta que he repetido con base en muchas evidencias", escribió Santana en UOL.
Otro caso en la lista es el de la periodista Patricia Melo Campos, de Folha de S.Paulo. Ella se volvió un blanco del entonces candidato en 2018, cuando publicó un reportaje que reveló que empresarios ligados a Bolsonaro habían financiado ilegalmente una campaña de desprestigio vía WhatsApp contra el candidato del PT, Fernando Haddad. En febrero de ese año, el diputado federal Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente, hizo insinuaciones machistas contra la periodista.
“Esta exposición sistemática genera ataques virtuales masivos de sus seguidores, con consecuencias concretas para la vida de esas comunicadoras, creando un ambiente aún más hostil para que las mujeres ejerzan su libertad de expresión y tengan presencia en el ambiente digital, político y social. El Estado brasileño tiene la obligación de garantizar un ambiente seguro para las mujeres periodistas”, dijo Santana.
Solo en 2020 hubo 245 ataques contra periodistas
Solo en este ano, el presidente Bolsonaro lanzó 245 ataques contra periodistas y medios informativos, según las investigaciones de la Federación Nacional de Periodistas (Fenaj, por su acrónimo en portugués). Entre estos están los 32 ataques personales a periodistas.
La organización asocia los ataques del presidente a agresiones reales sufridas por profesionales de prensa en el país. “Los ataques de Bolsonaro a la prensa estimulan la violencia contra periodistas en coberturas diarias. (…) Además, a lo largo del semestre, los periodistas que hicieron una cobertura crítica del gobierno fueron atacados en redes sociales, y algunos hasta vieron publicados sus datos personales", informó la Fenaj en su sitio.
En marzo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos exhortó a Brasil a garantizar el trabajo de los periodistas.
