Con casi tres décadas reportando conmovedoras historias desde México y el Caribe, la periodista radial estadounidense Carrie Kahn ha sido galardonada con el prestigioso Premio Maria Moors Cabot 2020.
“¡Es un gran honor! Estoy muy impresionada y agradecida por el premio, especialmente porque este premio viene de mis colegas y pares en la región”, dijo Kahn en entrevista con LatAm Journalism Review.
Kahn empezó a trabajar para la radio pública estadounidense National Public Radio (NPR) en 2003. En los últimos ocho años, se ha desempeñado como corresponsal de NPR en México y el Caribe. Desde su sede en México, la periodista ha documentado el incremento de la violencia en ese país, las historias de secuestros y asesinatos del Cartel de Sinaloa en el país y la posterior captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán, según señala el sitio web de NPR.
Asimismo, ha reportado para NPR las historias de migrantes centroamericanos, viajando con ellos en su trayecto hacia Estados Unidos, y publicado historias muy personales de familias que han sido separadas y destruidas por la deportación y las recientes leyes antimigrantes del actual gobierno de Estados Unidos.
La Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia le ha otorgado el Premio Cabot 2020 a Kahn y otros tres periodistas de Colombia, Brasil y Estados Unidos, por su valentía y dedicación en su labor como periodistas de investigación en su cobertura de las Américas, según indicó la institución en su nota de prensa al anunciar a los ganadores del premio el 15 de julio.
“Carrie Kahn ha estado compartiendo historias de México y el Caribe de manera enérgica en la radio durante casi tres décadas. Con el micrófono en la mano, comenzó a captar las voces de la región fronteriza como periodista local en San Diego en 1994”, señaló la institución en su comunicado.
Con una licenciatura en Biología, Kahn trabajó muchos años en California como investigadora en genética humana antes de dedicarse al periodismo.
LJR: ¿Qué significa para usted el premio Maria Moors Cabot? ¿Cómo se siente tras recibirlo?
CK: “¡Es un gran honor! Estoy muy impresionada y agradecida por el premio, especialmente porque este premio viene de mis colegas y pares en la región. Tienes que ser nominado para el premio y ser recomendado por tus colegas que conocen y trabajan en la región. Es realmente el más alto honor que he recibido en mi carrera y significa muchísimo para mí”.
LJR: Considerando el tipo de periodismo que realiza, ¿qué significa para usted ser periodista en su país y trabajar como periodista estadounidense en la región latinoamericana?
CK: “Creo que ser periodista estadounidense en América Latina te permite ciertas protecciones y privilegios que los periodistas nacionales no tienen. Creo que es muy importante hacer alianzas y colaboraciones con los periodistas locales, no solo para ayudarlos en sus reportajes cuando sea posible, sino también para brindarles asistencia y solidaridad en circunstancias que se han tornado muy difíciles para muchos reporteros honestos y trabajadores aquí (en México)”.
LJR: Esta pandemia ha exacerbado las desigualdades que existen en las Américas. ¿Qué asuntos o tipos de reportajes considera usted que son cruciales de cubrir durante la pandemia?
CK: “Exactamente eso que acabas de señalar, las desigualdades que han sido exacerbadas por la pandemia. También me interesa hacer un seguimiento de cómo los gobiernos están manejando la pandemia en el sector salud y también a nivel económico. Hemos visto los reportes aterradores sobre la gran recesión económica que atraviesan todos los países de América Latina, así también como hemos visto la dramática debacle económica de muchas personas, con millones de personas cayendo en la pobreza. Estamos viendo una generación posiblemente perdida debido a la pandemia, en términos de prosperidad económica; ese debe ser el tema que continuemos cubriendo en los próximos años”.
LJR: ¿Cómo crees que esta pandemia ha redefinido la manera de hacer reportajes?
CK: “Bueno, realmente no he salido de mi oficina desde que empezó la pandemia. Eso ha hecho que el reporteo sea muy difícil. [Pero] me ha permitido acceder más rápido a más personas, mediante el teléfono y los aplicativos de grabación. Muchas personas que antes hubieran pedido una visita en persona, han optado más rápidamente por entrevistas telefónicas y por internet”.
LJR: Cuando piensa en todas las personas que ha entrevistado y en todas las historias que ha cubierto, ¿cuáles dirías que han sido las más interesantes o de las que más aprendiste?
CK: “Oh dios, esa es una pregunta muy difícil. Llevo décadas haciendo reportajes. Creo que las que más se me han quedado son probablemente las historias más desgarradoras, en las que he acompañado a personas que han vivido desastres naturales horribles, ataques criminales, en las que han perdido la vida o la de sus seres queridos. Encuentro una satisfacción particular cuando veo que mis reportajes provocan cambios en instituciones, funcionarios o defensores que ayudan a mejorar la situación económica, política o personal de alguien. También disfruto los momentos de alegría y diversión en mis reportajes, especialmente me gusta cuando puedo salir a la naturaleza y aprender y ver nuevos lugares y paisajes majestuosos.