Por Louise Roberts*
Libertad de expresión y preservación de la memoria son las principales propuestas de biografías históricas que están siendo amenazados por la ley en Brasil. Esta es la preocupación que expusieron los escritores Mário Magalhães y Audálio Dantas en la Conferencia Global de Periodismo de Investigación el lunes 14 de octubre, al discutir sobre los retos de escribir una biografía no autorizada.
Para Audálio - autor del libro que cuenta la historia del periodista Vlado Herzog - el pago del 10% del valor de las ventas para los biografiados, o para sus familias, es "una acción contra la libertad de expresión". Para escribir Las dos guerras de Vlado Herzog, el periodista buscó información sobre la vida de su personaje en el Archivo Nacional.
"Yo tenía en mis manos la autorización de la familia para ver los documentos, pero en el Archivo me dijeron que tenía que presentar también el certificado de defunción. Me negué a dar un documento falso. Herzog no se mató. Fue torturado y asesinado", dijo. Audálio tuvo que buscar al ministro de Justicia para obtener el permiso. Ya en el archivo, el escritor tuvo serias dificultades para encontrar información.
"Muchos de los documentos buscados estaban escondidos y muchos otros sí estaban en su lugar. Aunque, prácticamente no existen documentos sobre Vlado entre mayo y diciembre de 1975, sólo algunos escasos informes y los documentos manipulados sobre el suicidio", recordó.
Audalio también dijo que la mayoría de los documentos a los que tuvo acceso eran falsificados. “La dictadura continúa presente en varias instancias de la República Democrática del Brasil”.
El autor de la biografía de Marighella, Mário Magalhães, consideró que las condiciones que la legislación prevé para la publicación de obras biográficas sobre personajes públicos son "muy graves".
"Marighella ha tenido una vida impresionante y yo tenía que deleitar a mis lectores con su historia. Para ello, recibí el permiso de su esposa e hijo”, dijo el escritor. La buena voluntad de la esposa hizo esto posible, es un caso raro. "No siempre se dan así las cosas; sin embargo, la familia de Marighella sabe que su historia no le pertenece a su esposa, ni a su hijo ni a mí. Le pertenece al Brasil".
De acuerdo con la legislación brasileña, no se puede escribir una biografía que atente contra la moral y reputación de figuras públicas. "El Estado no puede prohibir a alguien contar la historia de una persona pública, con proyección pública", opinó Magalhães. "Hubo guerrilleras que se enfrentaron a sus familias para salir a luchar a las calles. Hoy en día, sus familias, con el respaldo de la ley, no permiten que se escriba sobre ellas. Es ese el tipo de riqueza que se pierde", explicó.
Magalhães también recordó el caso del albañil Amarildo de Souza, arrestado en Rocinha hace tres meses por la policía para ser interrogado en la Unidad de Policía Pacificadora (UPP). Más de 20 agentes que sirvieron en esa base de la UPP están siendo investigados por sospechas de tortura, asesinato y desaparición del cuerpo.
La reflexión de Magalhães refuerza su opinión sobre los defectos de la ley: "Hoy hace tres meses que desapareció Amarildo. El mayor Edson Santos, de Rocinha, junto con otros oficiales, es uno de los sospechosos (de su muerte). El mayor Edson es una figura pública, pero según la ley, sólo se puede escribir su biografía si él la autoriza, y bajo sus términos. Esto es moralismo retórico".
La tarea de escribir una biografía es extensa y puede durar años. Para poder terminar su libro, Magalhães tuvo que dedicarse exclusivamente a él. Cuando se le preguntó acerca de las herramientas básicas para ser un buen periodista de investigación, él respondió rápidamente: "Es necesario saber cómo contar una historia. Ustedes, periodistas, no menosprecien el talento que se requiere para contar una buena historia". --- La periodista Eliane Brum moderó la discusión de Magalhães y Audálio y respondió tres preguntas sobre la importancia de saber contar historias. Lea aquí la entrevista.
*Louise Roberts es una estudiante del cuarto año de periodismo en la Escuela de Comunicación de la UFRJ.
Este articulo fue originalmente publicado en el sitio web de la Conferencia Global de Periodismo de investigación.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.