La forma en la que operan las plataformas de redes sociales y de mensajería con los contenidos de los medios sería uno de los grandes factores que contribuyen a la gran crisis de confianza en las noticias, de acuerdo con periodistas, editores y académicos de Brasil, India, Estados Unidos y Reino Unido.
Según el Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo, los profesionales de medios e investigadores consultados para su estudio también analizaron hasta qué punto la convergencia de los formatos de noticias, como elementos de video o audio, puede aprovecharse en los medios impresos o digitales para comunicar “con más humanidad” las noticias detrás de los titulares y ayudar a restablecer la confianza con la audiencia.
Como producto de este diálogo, y con el apoyo de Facebook Journalism Project, se publicó el informe “Profundidad y amplitud: cómo gestionamos los medios los costes derivados de mejorar la confianza en las noticias”.
En octubre de este año, el Instituto Reuters invitó a 54 participantes, entre investigadores, periodistas y editores de cuatro países: Brasil, India, Estados Unidos y Reino Unido. Ellos participaron de 9 mesas redondas virtuales para debatir sobre las estrategias que pudieran afianzar o promover la confianza en los medios de comunicación.
Uno de los objetivos principales de este informe, que es el cuarto de la serie sobre confianza en las noticias, es entender más a fondo lo que significa la confianza para los públicos de los medios en el Sur Global (Brasil e India), y del Norte Global (Estados Unidos y Reino Unido).
“Buscamos hacer un balance de las novedades en torno al estudio de la confianza en las noticias, muchas de las cuales resaltamos en relación con los puntos relevantes que plantearon los periodistas en las mesas redondas”, indica la organización en su sitio web.
Durante las mesas redondas, los participantes discutieron las estrategias utilizadas en el pasado, las que funcionaron y las que no, para generar confianza con sus audiencias. Asimismo, dialogaron sobre los obstáculos y retos que enfrentaron al aplicar sus estrategias y la manera en que se relacionaron con sus lectores o espectadores en plataformas y redes sociales como Facebook, Google y WhatsApp.
Muchos consideraron que las redes sociales resultan ser obstáculos a la hora de querer establecer una relación estrecha con las audiencias, y para otros, la principal preocupación en ese esfuerzo es la influencia de los políticos en sus partidarios y su descrédito hacia el periodismo.
“Los algoritmos hacen difícil que nos hagamos notar”, dijo Pedro Borges, editor en jefe y cofundador de Alma Preta, de Brasil, señaló el estudio. En opinión de Borges, las plataformas enganchan a la audiencia al mostrar contenido polarizado y el agregar nombres como Lula o Bolsonaro en las historias en línea es una manera fácil de conseguir más clics.
“La gente ni siquiera se molesta en abrir el artículo y leerlo. Solo miran el título y empiezan a lanzar insultos de los más bajos”, dijo Borges durante su participación en las discusiones.
La falta de control de los medios sobre su contenido al ser utilizado por plataformas sociales sigue siendo un desafío para su reputación y la confianza de su audiencia en estos espacios.
Otro de los puntos que definen la manera de buscar construir confianza en las noticias con las audiencias es el modelo de negocio de cada organización, señala el informe.
Por ejemplo, las organizaciones de noticias sin fines de lucro, con modelos de negocio de membresía o que funcionan con donaciones de otras organizaciones, están más interesadas en afianzar sus lazos de confianza con grupos de audiencia específicos.
Según el informe, el editor del medio brasileño Volt Data Lab, Sergio Spagnuolo, dijo que ellos necesitan crecer “con más calidad, con gente que realmente se enganche y pague, o se vuelva miembro o algo así, en vez de solo mirar el sitio web”.
Asimismo, para muchas organizaciones participantes, la construcción de la confianza tiene que ver con la reputación de la calidad y precisión que posee el medio.
El editor adjunto de The Times, del Reino Unido, Tony Gallagher, dijo en una de las discusiones que notaron que su audiencia aprecia cuando ellos corrigen sus errores de forma oportuna y pública, y cuando atienden sus inquietudes en la columna semanal.
“Nos dimos cuenta de que a los lectores les gusta ver eso, que no les gusta que te rehúses a corregir algo y que tome meses en aparecer”, dijo Gallagher.
Las iniciativas de verificación de datos, en ese sentido, son otra manera en que las organizaciones se diferencian por su contenido, indicó el informe.
El director de contenido de Record TV, el periodista brasileño Thiago Contreira, dijo que su medio intenta ser una fuente confiable de información en redes sociales.
“La sensación que tengo es que perseguimos nuestras propias sombras, ¿verdad? Mientras trabajamos, es necesario contar con tiempo para verificar la información y transmitir dicha información al público; eso lleva tiempo. Mientras lidias con esto, se están publicando cientos de noticias falsas a favor de cualquier espectro político, ya sea de derecha o de izquierda ... es muy difícil, es como secar el hielo”, dijo Contreira según el reporte.
Entre las conclusiones que destaca el estudio están la falta de capacidad de los medios para enfrentar las brechas de confianza con sus audiencias digitales —sobre todo para los medios pequeños—, además del poco optimismo de una parte de los medios para hacer frente a los desafíos financieros y el ser blanco de críticas.
Asimismo, dependiendo de la estructura y misión de cada medio, algunos participantes identificaron la necesidad de concentrarse en afianzar la confianza de la audiencia ya fidelizada. Para otros, la apuesta es tratar de generar confianza con las audiencias que en general desconfían de los medios.
La disyuntiva de atraer a nuevas audiencias o de crear lazos más fuertes con los miembros o suscriptores ya existentes es algo que, según el estudio, causa tensión entre los participantes de los cuatro países. Por tanto, la mayoría prefiere optar por fortalecer los lazos ya existentes con su audiencia, la cual está dispuesta a pagar por el contenido.
Desafortunadamente, señala el estudio, pocas organizaciones de noticias tienen incentivos claros para invertir en generar confianza con partes del público que son escépticas o abiertamente hostiles.
El informe señala que las estrategias que se pueden aplicar para generar confianza en públicos indiferentes al periodismo y a la política deben ser distintas a las que se planifican para las audiencias que sí muestran interés.
Algunos de los participantes consideran que construir confianza a través de iniciativas editoriales también significa realizar coberturas que incluyan a las audiencias que, en el pasado, han sido tradicionalmente poco representadas, ignoradas o estigmatizadas por los medios.
Para Giuliana Bianconi, directora y cofundadora de Gênero e Número, de Brasil, el enfocarse en temas de género y raza en asuntos políticos “genera antagonismo con la ultraderecha en Brasil”. Sin embargo, Bianconi resalta la importancia de tener una mayor diversidad de periodistas y comunicadores para poder llegar al público que suele dejarse de lado.
“Un público con menor nivel de educación, un público de la periferia, de las favelas, ¿no tendrá representación en los medios? No leerá Folha de São Paulo, Estado de São Paulo [los principales diarios brasileños], ¿qué leerán estas personas? Uno debe entender cuando estemos hablamos de Brasil, ¿verdad?”, dijo Bianconi
Los participantes de los cuatro países coincidieron en que existe un alarmante y peligroso nivel de acoso y resentimiento contra periodistas en la sociedad, y que este se refleja en los mensajes de odio que reciben a través de redes sociales. De acuerdo con el estudio, sobre todo contra los periodistas de color y mujeres.
Hasta el momento, tampoco se sabe mucho hasta qué punto la crisis de confianza en las noticias está relacionada con la crisis de confianza en otras instituciones de la sociedad, y cómo podrían los medios reconectar con su audiencia teniendo tantos factores en contra, subraya el estudio.
Puede leer el estudio completo en inglés en este enlace.