La periodista independiente mexicana Alejandra Xanic von Bertrab, ganadora del premio Pulitzer por investigar la red de corrupción y sobornos que fueron parte de una agresiva estrategia de expansión de los supermercados Wal-Mart en México, cuenta en una entrevista con el Centro Knight para el Periodismo en las Américas cómo se sumó a la investigación que inició David Barstow, del diario New York Times sobre las operaciones de la cadena de supermercados más grande del mundo en México.
“Es una historia que se construyó a partir de las leyes de transparencia en México”, asegura Von Bertrab. Su investigación requirió 18 meses de total dedicación, unas 800 solicitudes de acceso a la información en oficinas municipales, estatales y federales de México, y unas 200 entrevistas en total.
Todo comenzó cuando el periodista estadounidense Barstow recibió documentos internos de la empresa sobre una red de corrupción para acelerar y facilitar la apertura de nuevas sucursales en México. Una fuente anónima le envió esos documentos. “Entonces él decidió que necesitaba que alguien en México lo ayudara a confirmar que esa información tenía visos de credibilidad”, explica la periodista afiliada al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).
Von Bertrab y Barstow nunca se habían visto antes de iniciar esta investigación pero colegas que tenían en común los pusieron en contacto. “Él me ofreció un proyecto a cambio de guardar un secreto”, explica Von Bertrab en entrevista telefónica desde la Ciudad de México. “Durante todo ese tiempo, lo mantuvimos sólo entre él y yo y eso fue una clave para tener la investigación bajo control”, agrega.
Entonces la mexicana emprendió un trabajo de un año entero dedicado por completo a esa investigación. “Yo me sentía como monja de convento porque mis amigos no sabían en qué trabajaba todo el tiempo. Fue un nivel de exigencia y aislamiento brutal”, asegura.
Para hacer periodismo de investigación, Von Bertrab recomienda aprender los nombres de los documentos oficiales y las diferencias entre un memo, oficio, orden de trabajo, minuta, entre otros. “En muchas oficinas de gobierno me volví parte del mobiliario, pasaba dos o tres días en un cuarto con cajas de archivos. Llegaba a las 8 de la mañana y me iba a las 7 de la tarde y sin embargo, nunca me preguntaron quién era yo ni por qué quería esa información”, dice.
La ley de transparencia en México le permitió trabajar en el anonimato porque prohíbe a los funcionarios públicos preguntar a un ciudadano quién es y cuál es el motivo de su solicitud de información. “Me asombró el respeto que existe a esa ley”, agrega.
“La gran alegría como mexicana fue comprobar lo bien que funciona la ley de transparencia”, asegura. “El tema es saber preguntar y entender la ley porque los funcionarios sólo pueden entregar información existente, no generar información”, explica.
Su investigación también requirió entender leyes y reglamentos de salud, medio ambiente, construcción hidráulica, servicios públicos y patrimonio histórico para entender qué tipo de normas eran las que trataba de sobrepasar o violar la compañía al construir nuevas sucursales así como los procedimientos y permisos necesarios para abrir una nueva sucursal.
“Lo que encontramos una y otra vez fue que siempre había un problema, un cabildo que se oponía a la tienda propuesta, una organización de comerciantes, grupos vecinales que se oponían al cambio de uso de suelo, conflictos de diversa índole, siempre había obstáculos”, explica.
El clímax de su investigación llegó al encontrar un mapa que prohibía proyectos comerciales en la zona aledaña a las Pirámides de Teotihuacán, donde la cadena Wal-Mart planeaba construir una sucursal. Para el conglomerado, el mapa era un obstáculo a vencer. El mapa debía publicarse en el Diario Oficial para convertirse en ley y para ello, los ejecutivos de Wal-Mart pagaron un soborno de 52.000 dólares para que un funcionario cambiara el mapa antes de enviarlo para su publicación, según los documentos y entrevistas que lograron obtener Von Bertrab y Barstow. “Pasamos seis meses buscando ese mapa”, dice Xanic.
Para Von Bertrab, el mejor premio de su trabajo de investigación fue aprender del experimentado periodista estadounidense. “Es el reportero más estratégico que he conocido. Es un jugador inteligente que sabe cuándo ser observadores y cuándo sacudir el árbol", dice.
Gracias a su experiencia con la Ley de Acceso a la Información de Estados Unidos (FOIA), Barstow recomendaba a Von Bertrab solicitar documentos como libros de visitas, buscar discos de computadora, CDs y discos duro de computadora. "Tiene ideas que a mí no se me ocurrían", dice.
La tarde del lunes 15 de abril en la redacción del diario The New York Times, Von Bertrab y Barstow recibieron juntos la noticia sobre los ganadores del Premio Pultizer, un premio totalmente inesperado, dice la periodista.
Según el sitio de los premios Pulitzer, Von Bretrab comenzó su carrera en Guadalajara, México y ha cubierto temas como el tráfico de drogas, corrupción estatal, asesinatos políticos y derechos humanos.
En 1992 recibió el Premio Nacional de Periodismo por su cobertura de varias explosiones en ocho kilómetros en las calles de Guadalajara. Ha trabajado para medios como los diarios mexicanos Reforma y Milenio, y revistas como Gatopardo, Expansión y National Geographic. Se ha convertido en una de las periodistas expertas en el uso de la plataforma del Instituto Federal de Acceso a la Información.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.