Las barreras cotidianas motivaron a los periodistas panameños Ana Graciela Méndez y Alfonso Grimaldo a crear El Tabulario -un proyecto lanzado a final de mayo el cual compila, analiza y divulga datos públicos con el objetivo de promover la transparencia en ese país.
Como periodistas de los principales medios de Panamá, Méndez y Grimaldo tenían enormes dificultades para obtener informaciones simples, como cuántas escuelas hay en el país o el gasto por alumno en la red pública de educación. Grimaldo cubrió economía y negocios, y Méndez hacía reportajes de investigación. Era como estar en un túnel sin salida todos los días.
“Era una frustración muy grande. Cada vez que queríamos encontrar un número, teníamos que hacer mil malabares. A veces eso significaba leer cientos de reportes para encontrar un dato específico, o teníamos que ir a las instituciones gubernamentales para encontrar la información. Panamá tiene una ley de transparencia, pero el 99% de la información que buscábamos, por ley, debería ser de fácil acceso y no lo era", dijo Méndez al Centro Knight.
Además de ser difíciles de encontrar, los datos públicos panameños muchas veces son contradictorios, según los periodistas. “Por ejemplo, la cantidad de estudiantes matriculados por año. Yo puedo presentarte tres reportes oficiales que me dan tres números distintos para esta unidad de dato para el 2014," explicó Grimaldo al Centro Knight.
Otro problema es la irregularidad en la compilación y publicación de los datos públicos. De acuerdo con los periodistas, cada gobierno indica un nuevo jefe de estadísticas y adopta un manual interno diferente para el área, lo cual hace casi imposible la continuidad en el análisis de los datos.
"Entonces un número que era contado bajo un gobierno no es contado bajo el otro," afirmó Grimaldo. E incluso cuando son compilados, los datos son publicados sin una lógica común, agregó.
"Cada ministro tiene su propia agenda. Por ejemplo, el Ministerio de Obras Públicas publica reportes cuando le da la gana, cada tres meses, a cada mes, no tiene ningún sentido. Nosotros tenemos que agarrar esos reportes trimestrales y segregarlos para atribuirles a los meses que corresponden," dijo el periodista. En muchos casos tampoco hay posibilidad de hacer un análisis a largo plazo, porque los órganos públicos no ofrecen series históricas.
"La ley de transparencia de Panamá establece que la planilla se tiene que publicar. Pero, ¿qué hacen? Suben la planilla de febrero y de ahí, termina febrero, bajan la planilla de febrero y suben la de marzo. Entonces, claro, obedecen la ley, pero no queda registro alguno, histórico, de la planilla gubernamental. Poco nos sirve saber qué le pagaron a quién en febrero. Para entender realmente cómo se mueve nuestro gobierno y adónde va la plata de nuestros impuestos hay que tener una idea histórica de la planilla estatal", contó el reportero.
Por todos esos motivos, Méndez y Grimaldo decidieron crear un proyecto para ayudar a los periodistas a encontrar datos públicos. En El Tabulario, los reporteros reúnen información recolectada de más de 30 instituciones panameñas y forman un enorme depósito de datos. Hay información sobre economía, salud, educación, entre otras áreas. El proyecto también es el primero en el país en ofrecer una serie histórica de la planilla de pagos del gobierno.
Para alimentar El Tabulario, los periodistas recogen datos publicados activamente por las instituciones gubernamentales, pero también hacen peticiones de información por diferentes métodos. Cuando reciben una respuesta, no siempre viene en un formato adecuado o moderno.
"Cada ministerio es su propia historia. A veces tienes que ir personalmente y recibir la data en USB o en centenas de páginas impresas, a veces por correo o directamente descargarla de los sitios web públicos. Y nada viene listo. Ana, por ejemplo, tuvo que pasar la data de donaciones de campaña manualmente de una tabla que estaba totalmente repleta de marcas de agua y otros obstáculos. A veces es un trabajo tedioso y molesto, pero alguien tiene que hacerlo," afirmó Grimaldo.
Después de organizar los datos, los periodistas verifican la información de posibles errores. Con ayuda de herramientas básicas de análisis de datos, los reporteros encuentran inconsistencias y entran en contacto con las instituciones responsables de los números.
"Ahí preguntamos: ¿por qué aquí hay un error? ¿por qué esto no cuadra? Y trabajamos con ellos por una solución. Como somos periodistas, el hecho de que haya inconsistencia de una data ya es una historia," dijo Grimaldo.
Renunciando al empleo
Antes de El Tabulario, los periodistas ya pensaban en crear un proyecto propio. "Aprendimos bastante en la prensa, pero también nos dimos cuenta de muchas oportunidades que podrían existir fuera,” afirmó Grimaldo. Hace tres años, el reportero dejó su empleo en un periódico panameño, mientras que Méndez estaba haciendo una maestría en periodismo en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos. Ambos se unieron con un tercer socio, Gaspar García de Paredes, del área de la tecnología. El grupo desarrolló un proyecto piloto, Panamá Vota, para cubrir las elecciones presidenciales de 2014 en el país.
Ante el éxito del sitio, los periodistas decidieron crear Nueva Nación, un newsletter con las principales noticias del mundo y de Panamá, el cual era enviado tres veces por semana a miles de suscriptores. El Tabulario surgió como un brazo de Nueva Nación, y agregó un valor al newsletter. Esto, porque los reportajes de datos hechos con base en El Tabulario son publicados en el boletín.
El proyecto ganó fuerza cuando Méndez recibió una beca del Brown Institute for Media Innovation. En 2015, El Tabulario tuvo una fuerte contribución financiera de la institución, que también apoyó el desarrollo del proyecto con consultorías y recursos tecnológicos.
Antes de recibir el financiamiento, los periodistas tuvieron que impulsar sus proyectos con recursos propios. El Tabulario fue presentado en un evento de lanzamiento en Panamá, realizado a final de mayo, en el que los periodistas aprendieron a usar la base de datos y otras herramientas.
Hoy, Méndez vive en Estados Unidos y trabaja en el proyecto con Grimaldo, quien reside en Panamá. Ambos se dedican totalmente a El Tabulario, mientras que estudian nuevas formas de financiar y hacer rentable el proyecto.
"Estamos discutiendo distintos modelos, pero todavía no hemos decidido exactamente qué ruta queremos tomar. Pero hemos decidido que un valor básico de nuestro proyecto es que jamás cobremos por la información pública que es de todos los ciudadanos. Queremos que sea independiente y de uso abierto", explicó Méndez.
Cultura de transparencia
Uno de los principales objetivos de El Tabulario, según sus creadores, es cambiar la mentalidad de los panameños. Ellos defienden que Panamá tiene ya las leyes y las instituciones necesarias para promover la transparencia, pero aún falta un cambio cultural.
"Más allá de ser un tema legal, es cultural. El funcionario no entiende aún que la data que él produce le pertenece al ciudadano. Sencillamente siente que la información es suya, de uso propio, de la entidad o para el presidente o quien sea la autoridad rectora. No se ve al ciudadano como un usuario básico de la ley," dijo Grimaldo. Para el periodista, es exactamente lo opuesto. El ciudadano es quien costea la producción de los datos y debe ser el principal público objetivo.
Méndez afirma también que el acceso a la información es esencial para que los individuos puedan entender su propio país y elegir mejor a sus representantes. “Lo más importante es que la gente se sienta con el poder de tomar decisiones informadas y eso solo se hace con el acceso real y transparente a la información que les pertenece,” dijo.
Grimaldo agrega: “La gente piensa que la transparencia es la cereza encima de un pastel de buena gerencia estatal, pero es falso. La transparencia es la base fundamental sobre la cual se construye estabilidad política tras el tiempo. Sin información, los líderes son incuestionables y así se separan de su base de control, que es el pueblo."
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.