Con esta, han sido al menos 12 veces las que la Fiscalía de Colombia ha llamado a declarar a la periodista Jineth Bedoya Lima en el marco de la investigación de la agresión en su contra que incluyó secuestro, tortura y violencia sexual ocurrida hace más de 17 años.
La última vez que Bedoya Lima fue a declarar fue el pasado 1 de marzo cuando tuvo que hacerlo en frente de sus victimarios. Para Bedoya, ese día la afectó “física, psicológica y emocionalmente”.
Por eso, según un mensaje publicado en su cuenta de Twitter este 11 de septiembre, Bedoya aseguró que no asistirá a la nueva citación que hizo la Fiscalía para el 22 de este mes. Aseguró que la entidad quiere que vuelva a reconocer a unas personas implicadas en su caso en un proceso que, según explicó, ya realizó hace tres años.
“Señores de la Fiscalía, no tengo tiempo para ir a esta audiencia, no voy a ir”, dijo la periodista en su mensaje. “Que quede en su consciencia que no fueron capaces de ejercer justicia en mi caso y que hay cosas más importantes: darle voz a mujeres sobrevivientes”.
Bedoya explicó que prefiere seguir trabajando en un proyecto que está realizando con mujeres sobrevivientes de violencia sexual en el municipio de Tumaco, departamento de Nariño, una de las regiones más afectadas por el conflicto armado del país.
La periodista fue secuestrada al frente de la cárcel Modelo de Bogotá a donde había llegada a entrevistar a un exjefe del grupo paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) el 25 de mayo de 2000. Tras sufrir tortura y violencia sexual fue abandonada en una carretera del país.
Desde entonces y sin abandonar su trabajo periodístico, ha buscado justicia que la han llevado a realizar investigaciones en su caso. Según ha asegurado, además de paramilitares, en el crimen en su contra también participaron agentes del Estado.
Bedoya y sus representantes legales que incluyen a la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) han criticado en varias oportunidades las reiteradas citaciones de la Fiscalía que la “revictimizan”.
Una de estas ocasiones fue frente a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) – entidad que también analiza el caso – en una audiencia en abril de 2016. En aquella oportunidad, una de las Comisionadas le preguntó al Estado colombiano si no consideraba un “fracaso” de la investigación el hecho de revictimizar constantemente a Bedoya al pedirle declarar “una y otra vez” sobre su crimen.
“¿Estaría el Estado de acuerdo en que el hecho de preguntarle repetidamente sobre su secuestro, tortura y violación denota el fracaso de sus investigadores?”, dijo la comisionada en la audiencia de 2016. “Porque tomar declaraciones de violencia sexual es un hecho muy sensible, doloroso y dramático para la víctima por lo ustedes deben tener a una persona propiamente capacitada para hacerlo. ¿No acepta que sus oficiales han fallado en sus deberes?”.
En los más de 17 años en los que se investiga el crimen, solo dos personas han sido sentenciadas. Ambas decisiones se produjeron el año pasado.
Sin embargo, Bedoya ha explicado que según su investigación del crimen, las autoridades no han llamado a todas las personas implicadaa en este, y no hay ningún tipo de avance para determinar los autores intelectuales.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.