El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, realizó 116 ataques contra la prensa y los periodistas en 2019, aproximadamente una declaración cada tres días, según el monitoreo hecho por la Federación Nacional de Periodistas (Fenaj, por su acrónimo en portugués).
La encuesta, publicada en enero, considera solo las declaraciones registradas por escrito por los medios oficiales del presidente, como Twitter, y las entrevistas y discursos transcritos en el sitio web de Planalto, el lugar de trabajo del presidente. Por lo tanto, la cantidad de ataques es incluso mayor que la contada por el informe, según Fenaj.
Según la presidente de Fenaj, María José Braga, esta es la primera vez que la entidad hace este tipo de monitoreo con un Presidente. Ella afirma que hoy hay una institucionalización de los ataques contra la prensa.
“Esto es algo inédito. Es la primera vez que tenemos en Brasil a alguien que ocupa la Presidencia de la República y realiza ataques sistemáticos contra los medios y los periodistas. Eso nunca había sucedido, ni siquiera en la dictadura. Por supuesto, eso fue mucho más grave porque hubo censura y represión directa, pero no hubo este ataque verbal sistemático que utiliza Bolsonaro”, le dijo al Centro Knight. Según Braga, las agresiones recurrentes son parte de una estrategia para desacreditar a la prensa.
El más reciente ocurrió el lunes 6 de enero. El Presidente criticó un artículo de UOL y dijo que los periodistas brasileños son una “raza en peligro de extinción”. En la entrada del Palacio de Alvorada, donde a menudo habla con la prensa y sus partidarios, el Presidente dijo que leer el periódico envenena y desinforma. Medios como Folha de S.Paulo y O Estado de S.Paulo hicieron eco de las declaraciones.
“Quien no lee el periódico no está informado. Y quién lee está desinformado. Tiene que cambiar eso. Ustedes son una especie en peligro de extinción. Creo que pondré a los periodistas de Brasil vinculados a Ibama [Instituto Brasileño del Medio Ambiente]. Ustedes son una raza en extinción”, dijo el Presidente, según el reportaje de Folha.
También recordó que canceló las suscripciones impresas de periódicos y revistas en el Palacio de Planalto. “Todos, todos (fueron cancelados). Ya no recibo más papel periódico o papel de revista. Quien quiera puede comprarlo. Porque nos envenena leer el periódico. Llega ya envenenado”, dijo, según un artículo de Estadão. Bolsonaro mantuvo, sin embargo, las suscripciones digitales. Después de las críticas por excluir a Folha de una licitación de la Presidencia de la República para suscribirse a medios de prensa nacionales e internacionales, Bolsonaro retiró la medida.
En otra ocasión, el 20 de diciembre, el Presidente le dijo a un periodista de Globo que tenía una “cara homosexual terrible”. “Tienes una cara homosexual terrible. Pero no te acuso de ser homosexual. Aunque no es un crimen ser homosexual”, dijo en la puerta del Palacio de Alvorada, según informó Globo. El ataque fue condenado por entidades como la Asociación Brasileña de Periodismo de Investigación (Abraji) y Fenaj.
Braga dijo que los ataques desgastan a los profesionales y que este tipo de cobertura, realizada en la puerta del Palacio de Alvorada, debe ser reevaluada por las compañías de medios.
“Sabemos que el presidente, por el cargo que ocupa, debe estar acompañado, y sus palabras y acciones deben ser informadas, pero hay un límite para la exposición de los profesionales de la prensa”, aseguró. Ella explicó que los periodistas son más vulnerables en la puerta del Palacio de Alvorada, debido a la presencia constante de simpatizantes del presidente.
“Hay un escuadrón de vítores que lo alienta a ser agresivo. Es una cobertura que, para Fenaj, debería abolirse. Esto es hacer un podio para que el presidente muestre su agresión y continúe esta práctica sistemática de ataque contra la prensa”, ella argumentó
Braga respondió a lo dicho por Bolsonaro acerca de que los periodistas son una “raza en peligro de extinción”. “El periodismo se está volviendo cada vez más necesario, precisamente debido al exceso de información. Es por eso que la mediación periodística es importante, para que la población tenga fuentes confiables a las que recurrir”.