Por Maira Magro
Los barrios periféricos albergan a un tercio de la población brasileña, pero son tradicionalmente ignorados por los grandes medios , excepto en notas en las que predominan los estereotipos. Un proyecto creado por el periodista brasileño Bruno Garcez, de 38 años, busca cambiar esa situación.
Con una beca de la Fundación Knight ofrecida por Centro Internacional para Periodistas (ICFJ, por su nombre en inglés), Garcez obtuvo un permiso de un año de su trabajo como corresponsal de BBC Brasil en Washington para formar periodistas ciudadanos en las comunidades más pobres en las afuera de São Paulo. El resultado es Mural, un blog de noticias de la periferia preparado por 30 corresponsales comunitarios, que cubren sus regiones con la perspectiva de aquellos que viven ahí.
Al completar seis meses de operación, el proyecto acaba de acordar una sociedad con el diario Folha de S. Paulo, por el cual el blog será albergado en el sitio del periódico, una señal positiva de que los grandes medios comienzan a abrirse a otras realidades del país. Para Garcez, que también fue reportero de Folha y de BBC Brasil en Londres, los medios han ido de a poco incorporando cambios iniciados en espacios en línea. “Con el periodismo ciudadano, surgen nuevas narrativas que reflejan más diversidad”, asegura.
Sepa más sobre Mural en la siguiente entrevista con Garcez, parte de una serie de proyectos originales del Centro Knight. Otros proyectos incluyen una cuenta en Twitter sobre libertad de expresión en las redes sociales, un mapa que compila la violencia contra periodistas y medios en México y otro mapa de casos de censura electoral en Brasil.
Centro Knight: ¿Cuál es la idea de Mural?
Bruno Garcez: Es un proyecto multimedia en internet que reúne textos y videos producidos por periodistas ciudadanos de la periferia de São Paulo, de comunidades como Capão Redondo, Jardim Ângela, Itaim Paulista, Jardim Brasília… La intención es ofrecer una mirada nueva, una visión desde dentro de un área que no está siendo contemplada por los grandes medios. Los alumnos pasaron por una formación básica en periodismo para convertirse en corresponsales de Mural, que también puede ser visto como el embrión de una agencia de noticicias de los barrios periféricos. También estamos en Twitter y en las redes sociales.
CK: ¿Quiénes son los corresponsales comunitarios?
Garcez: Actualmente tenemos 30 miembros, divididos en dos clases. Son personas de 18 a más de 50 años, con la media en sus 20. La mayoría son estudiantes de periodismo que entraron a la universidad a través de Prouni (el programa del gobierno federal que ofrece becas a las familias de escasos recursos). Otros son periodistas aficionados que escriben sus propios blogs, como Vander Ramos, un señor de más de 50 años que desde 1997 tiene un sitio sobre Itaim Paulista (un barrio de la zona este de São Paulo). Algunos están interesados simplemente en cuestiones de sus comunidades, como Telma Amorim, de 18 años, que trabaja como telefonista [y] nunca fue periodista… Todos participan en el proyecto en forma voluntaria.
CK: ¿Cómo fue la formación de los periodistas ciudadanos?
Garcez: Creé una clase en junio, actualmente con 14 alumnos, y otra en agosto, con 21 integrantes. Primeros, tuvieron clases sobres conceptos básicos de periodismo, además de talleres de narración y video. Las clases clases eran los fines de semana, durante cuatro o cinco días, y duraban ocho horas, el día entero, en la sede de Folha de São Paulo, aunque no teníamos vínculos con el periódicos. Comenzábamos el día leyendo y analizando los diarios. Yo preguntaba: ¿Como fueron retratadas sus comunidades? Ellos evaluaban, por ejemplo, la cobertura de una ocupación de la comunidad de Paraisópolis y concluían que algunos diarios y revistas sólo mostraban la visión de la policía. Después pasamos a la producción de pautas informativas, de textos y de videos, buscando siempre incoporar la visión de ellos sobre sus barrios, siguiendo la idea atribuida al [escritor ruso León] Tolstói: “Pinta tu aldea y serás universal”.
CK: Para ellos, ¿qué significa entrar en la sede de un gran periódico como Folha?
Garcez: Ésa es una parte muy atractiva. Trabajamos en una sala separada, con computadores. Pero paseamos por la redacción y ellos mencionaron un deseo de trabajar en el diario. La idea ahora es estrechar laa relación con los reporteros.
CK: ¿Como funcionará la sociedad con Folha?
Garcez: Mural será albergado en el sitio Folha.com, en la sección de blogs, junto a otros como Folhateen, o los blogs de los corresponsales… Yo concluí mi participación en el proyecto este mes y a partir de aquei la que va a estar al frente de Mural es la periodista Izabela Moi, subeditora del cuerpo Ilustríssima. El proyecto no cuenta con patrocinadores y Folha no aporta dinero, sólo hospeda el blog en su sitio.
CK: ¿Cómo funcionan las discusiones de pauta y la producciónd e textos?
Garcez: Ahora las dos clases se han integrado. Reuniones presenciales con los alumnos al menos una vez al mes, discusiones colectivas de ideas, discusiones sobre el proceso de producción, las entrevistas... Además, nos mantenemos en contacto todo el día, varias veces al día, a través de las redes sociales. También nos reunimos cuando tenemos algún evento importante. Las elecciones, por ejemplo, fueron días de trabajo arduo. Ellos hicieron pautas muy interesantes. Un grupo registró cómo los candidatos ensuciaban las calles [con su propaganda electoral], otro hizo un video sobre lo que llevaba a las personas a votar en Tiririca. Los trabajos también hablaban sobre la realidad de los barrios, como niños jugando en el mismo lugar donde pasaban ratas, en una cloaca abierta en la Vila Rubi; outro mostró el Jardim Romano inundado por las lluvias… También hicimos obituarios usando música rap y mostrando, por ejemplo, la historia de la muerte de una persona involucrada en el crack.
CK: ¿Qué tipos de dificuldades enfrentaron?
Garcez: Al comienzo, hacíamos textos informativos tradicionales, con un carácter bien noticioso. Sin embargo, la investigación se complicaba, porque los organismos oficiales no nos tomaban en cuenta. Entonces propuse la idea de hacer textos de observación, no necesariamente reportajes clásicos. Las fronteras del periodismo se están expandiendo mucho, flirtean con el ensayo y con la crónica. Ese tipo de historia es válido y a veces tiene hasta más impacto que un reportaje tradicional.
CK: ¿Cómo es el interés y la participación de los alumnos?
Garcez: Tienen una avidez impresionante por participar, porque se sienten ignorados por los grandes medios. No tienen espacio para hablar sobre lo que ocurre en sus comunidades y cuando sí son retratados, es generalmente de forma prejuiciosa, con estereotipos. Ellos no quieren hablar sólo sobre la violencia y los proyectos sociales, sino también de otras cosas que les preocupan y que nunca llegan a un gran medio de prensa. Si hablan sobre Capão Redondo, quieren mostrar las fiestas de reggae y dub, una obra de arte, una marca… Al comienzo de la capacitación, temía una baja participación porque estábamos en plena Copa del Mundo. Por supuesto, las clases no coincidían con los juegos de Brasil, pero aparte de eso, a pesar de la época, los alumnos estaban completamente involucrados.
CK: ¿Hay una demanda creciente en estas comunidades por un mayor involucramiento con el periodismo?
Garcez: Sí, hay una demanda grande y creciente. Veo mucha gente de los barrios en la periferia que conversan sobre los libros de Gay Talese [ periodista estadounidense pionero del nuevo periodismo].
CK: ¿Por qué se interesó usted en desarrollar el proyecto Mural?
Garcez: Cuando era reportero en São Paulo, me incomodaba ver que la periferia no era retratada. La prensa tuvo una postura elitista por mucho tiempo y está empezando a cambiar. Creo que el periodismo va a experimentar una sacudida. Con el periodismo ciudadano han surgido nuevas narrativas que reflejan más diversidad [y] personas que no tienen formación específica también han comenzado a participar. El espacio para esta experimentación es online, aunque creo que poco a poco los imprensos absorberán estas transformaciones.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.