Por Maira Magro
Reconocidos por las víctimas y sus familiares en imágenes en periódicos, revistas y en televisión, tres delegados de policía civil de Sao Paulo fueron acusados por la fiscalía de participar directamente en en actos de tortura, abuso sexual, desaparición forzada y homicidios durante el régimen militar (1964-1985), informó la propia fiscalía.
La acusación pide la expulsion inmediata, la pérdida de sus cargos y las pensiones de los agentes Aparecido Laertes Calandra, David dos Santos Araújo y Dirceu Gravina (los dos primeros en retiro y la tercera aún activa), además de su condena y la reparación de daños morales colectivos, así como la restitución de las indemnizaciones pagadas, reportó Terra.
Los procuradores afirman que, además de otros crímenes, el agente Aparecido Laertes Calandra (bajo el nombre de Capitán Ubirajara) participó en el montaje de la versión de que el periodista Vladimir Herzog se había suicidado en la cárcel, dice el sitio de la fiscalía. Herzog, director periodístico de TV Cultura en Sao Paulo, fue hallado muerto en dependencias del Ejército en Sao Paulo en octubre de 1975. Un comunicado oficial del Ejército dijo que se había suicidado. En 1978, en un gesto simbólico, un juez declaró a la policía federal culpable de la tortura y muerte del periodista. El caso provocó indignación y protestas en contra de la dictadura brasileña.
Lea aquí los informes de la fiscalía (archivo PDF en portugués).
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.