El gobierno federal de México firmó el Acuerdo Comercial contra la Falsificación (ACTA en inglés), a través de su embajador en Japón, el miércoles 11 de julio. La firma del acuerdo despertó polémica ya que el Senado y la Comisión Federal de Telecomunicaciones recomendaron no firmar este acuerdo internacional puede poner en riesgo la libertad de expresión, reportó el sitio Sin Embargo.
ACTA es un acuerdo multinacional que busca combatir la piratería de bienes, marcas, invenciones, obras intelectuales y artísticas, según explica el sitio Global Voices.
Pero sus críticos aseguran que el acuerdo atenta contra de la libertad de expresión en internet, según dijo Octavio Islas, director de investigación del World Internet Project en México a la revista Alto Nivel.
Entre las secciones más controversiales de este acuerdo, incluye obligar a los proveedores de servicios de internet (ISP) vigilar la comunicación de los usuarios, modificar las reglas de “uso justo” de material protegido por derechos de autor y criminalizar el uso compartido de archivos digitales, explica el blog Sopitas.
Por su parte, el Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual (IMPI) defendió la firma del acuerdo al asegurar que “con ACTA no se censurarán sitios de internet, nadie, ni las autoridades perseguirán a los usuarios de internet por compartir archivos privados sin fines de lucro", afirmó Rodrigo Roque, titular del IMPI, al diario La Jornada.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.