La distribución de los diarios Clarín y La Nación fue bloqueada en Buenos Aires por integrantes del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas en la madrugada del lunes 29 de octubre, informó el diario Clarín. Alrededor de 100 activistas pusieron neumáticos sobre la calle para impedir la salida de los vehículos de las plantas de impresión, agregó el diario.
Diputados de la oposición condenaron que a pesar del fallo judicial que exige la libre circulación de los medios de prensa, los agentes de policía que estaban en el lugar “se limitaron a observar cómo se instrumentaba el bloqueo”. La protesta tiene su origen en la petición de los trabajadores de un aumento de la comisión que se cobra por la venta de los diarios.
El Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Provincia de Buenos Aires (Sivendia) señaló que fue un “éxito el paro sopresivo de diarios”, publicó en su página oficial. Omar Plaini, secretario general de Sivendia, aseguró que la lucha no terminará hasta que no les devuelvan el porcentaje “que les quitaron a los vendedores”.
Ningún diario circuló en Buenos Aires y su área metropolitana el lunes. Además de los matutinos que se imprimen en las plantas bloqueadas -- Clarín, Olé, Muy y La Nación -- otras distribuidoras de diarios se unieron a la protesta y no repartieron el resto de periódicos que se editan en la ciudad, añadió Clarín.
La Sociedad Interamericana de Prensa, SIP, deploró este bloqueo al que consideró un ataque a la libertad de prensa ya que se atentó contra el derecho de dos diarios de llegar a sus lectores y “contra el derecho de los ciudadanos a recibir informaciones y opiniones”, señaló su comunicado oficial.
La SIP recordó que no es la primera vez que en Argentina se ataca este derecho fundamental pues en 2011 hubo cinco bloqueos a diarios y este hecho fue el segundo en el último trimestre del año, agregó su comunicado. También calificó como grave “la conducta pasiva del gobierno” del que Plaini aseguró “nos está acompañando”.
Asimismo, la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas, Adepa, calificó el hecho como un “gravísimo atentado al derecho de los ciudadanos a informarse por las fuentes que eligen”, informó el portal Rionegro. Recordó que este se trata de un delito penal, se quejó de la innacción policial y pidió a las autoridades “la inmediata intervención” en defensa de la libertad de expresión, agregó el portal.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.