El 2016 fue un año crítico para el ejercicio del periodismo en el mundo, según coincidieron tres organizaciones internacionales promotoras de la libertad de expresión y de prensa en sus reportes anuales, dados a conocer esta semana.
El diario Norte de Ciudad Juárez cerró su sitio web Norte Digital el 4 de abril por la noche, dos días después de publicar el editorial de despedida de su última edición impresa. Tanto la versión digital como la impresa del diario fueron cerradas por decisión de su director, Óscar Cantú Murguía, por no existir garantías y seguridad para ejercer el periodismo crítico en el país.
El Foro de Periodismo Argentino (Fopea) presentó recientemente el reporte Monitoreo de Libertad de Expresión 2016, en el que registra y analiza los 65 ataques y agresiones directas que sufrió la prensa argentina durante ese año.
A pesar de que la seguridad de periodistas se ha convertido en un tema de preocupación en organizaciones internacionales como la ONU, que incluso proclamó un día para incentivar la lucha contra la impunidad en los crímenes contra periodistas, las cifras de los diferentes ataques de los que estos son víctimas parecen no disminuir.
Con la presencia del subdirector General de la Unesco para la Comunicación e Información, Frank La Rue, representantes de los tres poderes de Paraguay firmaron el pasado 28 de noviembre una Carta de Intención para Establecer un Mecanismo de Seguridad a los Periodistas del Paraguay.
Otro periodista de Veracruz, México, fue asesinado, a pesar de contar con protección del Estado.
La situación de seguridad para la prensa colombiana parece estar empeorando en medio de los procesos de paz que adelanta el Gobierno con grupos guerrilleros del país.
Poco después de que el Ministro de la Presidencia de Bolivia, Juan Ramón Quintana, la señalara como parte de un “cartel de la mentira”, y frente a las amenazas por parte del gobierno, la periodista boliviana Amalia Pando solicitó protección a su labor periodística ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a través de un pedido de medida cautelar, informó la agencia EFE.
Utilizando el sistema SecureDrop, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés) lanzó una plataforma digital a través de la cual periodistas y otras personas alrededor del mundo lo puedan contactar de manera segura para compartir información o hacer denuncias sobre violaciones a la libertad de prensa.
El periodista Manuel Torres González, de 45 años de edad, fue asesinado de un disparo en la parte posterior de la cabeza, el 14 de mayo, al salir de las oficinas gubernamentales de la ciudad de Poza Rica, al norte de Veracruz, reportó Milenio, citando información de la Fiscalía General del estado de Veracruz.