El conductor de un exalcalde paraguayo es la primera persona condenada en el caso del asesinato del periodista Pablo Medina y su asistente Antonia Almada. El exalcalde, Vilmar Acosta Marques, es acusado de ser el autor intelectual de la muerte de Medina.
Un juez condenó a Arnaldo Cabrera, exconductor de Acosta Marques, a cinco años de prisión acusado del delito de “omisión de comunicar sobre un hecho punible”, según Última Hora. Sin embargo, fue absuelto del asesinato de Medina y de Almada.
Última Hora dijo que Cabrera fue contratado como conductor para la ciudad de Ypejhú, pero en realidad fue secretario personal de Acosta.
“Después de trabajar con Vilmar como chofer me enteré de que él tenía un problema con un periodista de la zona, de nombre Pablo Medina, que le perjudica políticamente, esto escuché en una reunión familiar que él mantenía”, dijo Cabrera a la Fiscalía, según el diario ABC Color.
Añadió que escuchó a su jefe que “iba a traer a su hermano Wilson Acosta del Brasil para que este elimine a las personas que políticamente les perjudicaban”, informó el diario.
Almada y Medina, corresponsal regional del diario más importante de Paraguay ABC Color, murieron el 16 de octubre de 2014 en la ciudad de Curuguaty.
Medina y sus dos asistentes regresaban de un viaje de trabajo cuando dos hombres en camuflaje los detuvieron y pidieron al periodista que se identificara. A continuación, le dispararon; Almada también recibió un disparo y murió más tarde.
Medina había sido amenazado con frecuencia debido a sus informes sobre la producción de marihuana y la actividad del tráfico de drogas en el este de Paraguay. Previamente había recibido protección policial asignada por el Estado, pero ésta fue retirada en 2013.
En noviembre de 2015, Acosta, exalcalde de Ypejhú y quien es conocido como Neneco, fue extraditado a Paraguay desde Brasil después de haber sido acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Medina.
En sus reportajes, Medina había vinculado a Acosta con el tráfico de drogas y algunos homicidios.
El exalcalde se convirtió en un fugitivo poco después de la muerte de Medina. Huyó hacia Brasil y su extradición se retrasó durante meses porque Acosta aseguraba ser un ciudadano brasileño.
Un segundo acusado en el asesinato, Flavio Acosta Riveros, fue detenido en el sur de Brasil el 9 de enero de 2016. Wilson Acosta Marques todavía se encuentra prófugo.
Medina fue uno de los tres periodistas asesinados en Paraguay en 2014, que lo convirtió en el país de América Latina más mortífero para periodistas ese año, según el Comité para la Protección de los Periodistas.
Para el primer aniversario de la muerte del periodista, sus colegas llevaron a cabo eventos conmemorativos y exigieron que se investigara el asesinato y se castigara a los responsables. También crearon una campaña en redes sociales para llamar la atención sobre la impunidad en los casos de asesinatos de periodistas paraguayos.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.