Un rechazo por parte de diferentes agremiaciones periodísticas recibió la Ley de Seguro de Vida e Invalidez para los Trabajadores de la Prensa en Bolivia que fue promulgada por el presidente Evo Morales el pasado lunes 10 de diciembre, informó el portal Los Tiempos. Dicho seguro se creará con los aportes mensuales del uno por ciento de los ingresos brutos de los medios de comunicación estatales y privados, y será manejado por una instancia con representación mayoritaria del estado, agregó el portal.
El pasado marzo, los trabajadores de los medios de comunicación habían pedido la aprobación de esta ley tras la muerte violenta de un reportero. De hecho, el nombre de la ley, "Hermanos Peñasco Laime", se debe a la muerte violenta de otros periodistas.
A pesar de que la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) expresó su apoyo a la iniciativa en mayo, cuando la ley pasó a la Asamblea, también afirmó que la manera como fue establecida “desvirtúa el propósito para el que ha sido formalmente concebido” al crear una carga impositiva a los medios de comunicación y al crear un fondo económico que “puede convertirse en una potencial fuente de intereses políticos, de corrupción y de otras prácticas” que van en contra de los valores éticos de un periodista.
Por esta razón la ANP, la Asociación de la Prensa de la Paz y los sindicatos de algunos periódicos como La Razón y El Diario rechazaron la norma la cual calificaron de “no concensuada”, añadió el portal Los Tiempos. Los trabajadores del diario La Razón señalaron también que lo establecido por la ley podría afectar sus derechos y la estabilidad laboral y aseguraron que recurrirían al Tribunal Constitucional para hacer respetar sus derechos, publicó el diario La Razón.
Por su parte, la ministra de Comunicación, Amanda Dávila, señaló que esta ley no afecta ningún derecho de los trabajadores debido a que “prohíbe la eliminación de cualquier beneficio con el pretexto de pagar este beneficio”, agregó La Razón.
Durante la promulgación de la ley, Morales criticó la actitud de algunos empresarios de medios de comunicación porque él considera al trabajador de prensa “como un esclavo de los medios, de los empresarios, ellos deberían haber impulsado estse seguro de vida, son dirigidos de manera mal intencionada”, informó el portal People. También se dirigió a las organizaciones periodísticas a quienes les dijo “No me pidan a mí libertad de expresión, pídanla a los dueños (de las empresas de comunicación)”, agregó el portal.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.
