Carolina de Assis is a Brazilian journalist and researcher who lives in Juiz de Fora, MG, Brazil. She holds a master's degree in Women’s and Gender Studies from the GEMMA Programme – Università di Bologna (Italy) / Universiteit Utrecht (The Netherlands) and has worked as an editor at Gênero e Número, a Brazilian digital magazine focused on data journalism and gender issues. She is especially interested in journalistic initiatives aimed at promoting human rights and gender justice. You can find her on Twitter: @caroldeassis
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Carolina de Assis es una periodista e investigadora brasileña que vive en Juiz de Fora, MG, Brasil . Tiene una maestría en Estudios de las Mujeres y de Género del programa GEMMA – Università di Bologna (Italia) / Universiteit Utrecht (Holanda). Trabajó como editora en la revista digital brasileña Gênero e Número. Le interesan especialmente iniciativas periodísticas que tienen el objetivo de promover los derechos humanos y la justicia de género. Puedes encontrarla en Twitter: @caroldeassis.
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Carolina de Assis é uma jornalista e pesquisadora brasileira que vive em Juiz de Fora (MG). É mestra em Estudos da Mulher e de Gênero pelo programa GEMMA – Università di Bologna (Itália) / Universiteit Utrecht (Holanda). Trabalhou como editora na revista digital Gênero e Número e se interessa especialmente por iniciativas jornalísticas que promovam os direitos humanos e a justiça de gênero. Você pode encontrá-la no Twitter em @caroldeassis.
Este es el segundo caso del Programa Tim Lopes de Protección a Periodistas desde que Abraji lanzó la iniciativa en septiembre de 2017 para investigar homicidios, intentos de asesinato y secuestros de profesionales de los medios de comunicación, así como también continuar con los informes interrumpidos por los asesinos.
En el proyecto Comprova (Comprueba), periodistas de 24 medios de comunicación van a realizar verificaciones cruzadas de contenidos que estén circunlando fuertemente en las redes sociales brasileñas y que estén relacionados con las elecciones, cuya primera vuelta se realiza el 7 de octubre.
En el primer día de la Copa Mundial de Fútbol masculino, que este año se celebra en Rusia, tuvo lugar uno de los momentos más lamentables de la cobertura periodística del evento hasta el momento.
La sede en Managua de Radio Nicaragua, emisora estatal del país centroamericano, fue atacada y destruida por un incendio en la madrugada del 8 de junio, según informó la prensa local.
La Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (Feadle) de México, con apoyo de la Policía Federal, ordenó el 6 de junio la aprehensión de Juan Francisco “N”, “por su probable participación en el homicidio del periodista Javier Valdez Cárdenas, ocurrido el 15 de mayo de 2017”.
Fundado en 1825, el brasileño Diario de Pernambuco enfrenta una crisis financiera que redujo un tercio de su redacción y mantiene a sus empleados en ritmo de espera cuando se retrasan los salarios, y en suspenso sobre el futuro del diario.
Las autoridades mexicanas arrestaron a Arturo Quintana, conocido como ‘El 80’, presunto líder de una banda criminal narcotraficante en el Estado de Chihuahua sospechoso de haber ordenado el asesinato de la periodista Miroslava Breach en marzo de 2017, según El País.
El proyecto #UmaPorUma, lanzado a fines de abril, está dedicado a contar la historia de cada mujer asesinada en el estado de Pernambuco, Brasil desde que comenzó el año
En 2017, el estado de Pernambuco, al noreste de Brasil, fue el tercero con mayor registro de crímenes violentos en el país. En un estado con 9 millones de habitantes, 5.427 personas fueron asesinadas el año pasado, el índice más alto en 14 años, según la investigación realizada por el portal G1.
En Brasil en 2017 hubo al menos 27 violaciones graves contra comunicadores, según un informe publicado el 3 de mayo por el capítulo brasileño de la organización internacional Artículo 19, que se dedica a la defensa de la libertad de expresión. Las informaciones recogidas por la ONG anualmente desde 2012 apuntan tendencias que se mantienen en el país: los políticos son los principales sospechosos de encargar o realizar las violaciones; ciudades pequeñas, con hasta 100 mil habitantes, son el principal escenario de lo