Una investigación interna de la Policía Civil de São Paulo determinó, tres años después del inicio del caso, que el arresto del reportero Roberto Cabrini fue fruto de un montaje de policías civiles, informó Folha de S. Paulo. El periodista, que actualmente conduce el programa Conexão Repórter, en la televisora SBT, permaneció detenido por dos días acusado de portar diez bolsas de cocaína en su automóvil en abril de 2008.
El día en que fue detenido, Cabrini iba acompañado de una comerciante que prometió entregarle videos que comprobarían los vínculos de varios policías con integrantes de la banda criminal Primeiro Comando da Capitales (o PCC). Según la investigación, la comerciante compró la droga para inculpar al reportero y avisó a los policías, explicó la Revista Contigo.
El informe de la oficina de asuntos internos de la policía paulista no explica qué motivó la participación de los policías en la emboscada, pero plantea como hipótesis el involucramiento de Oscar Maroni Filho, dueño de un club nocturno que fuera calificado en un artículo del periodista como un "prostíbulo de lujo", afirmó O Estado do Paraná.
"Fui víctima de unos malos elementos en la policía, que fueron blanco de mis denuncias", dijo Cabrini, citado por Folha de S. Paulo. En cuanto a Maroni, el periodista afirmó que el empresario era una de las personas molestas con sus reportajes.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.