El diario Folha de São Paulo, el segundo de mayor circulación en Brasil, según la Asociación Nacional de Periódicos (ANJ, por sus siglas en portugués), lanzó el domingo 18 de septiembre de 2011, un sitio semejante a WikiLeaks, por medio del cual los lectores pueden enviar documentos, anónimamente o no, informó la publicación.
La inspiración es obvia: el FolhaLeaks es definido como "un programa creado para recibir información capaz de generar reportajes de interés público".
Según el semanario Observatório da Imprensa, hasta la mañana del lunes, 19 de septiembre se habían recibido 1350 denuncias. "Si se mantiene el promedio de lanzamiento, será necesario montar un equipo especial para hacer la primera selección de colaboraciones", resaltó el sitio, añadiendo: "Es de esperarse que impere la responsabilidad periodística, pero nadie garantiza que no haya filtraciones en el trabajo, por ejemplo, cuya entrega de información sigue siendo confidencial, dañando así el importante resultado de las investigaciones oficiales".
En mayo, el Wall Street Journal generó polémica al lanzar su propio sitio de filtraciones de información, el SafeHouse. Para los críticos, puede no ser tan seguro.
Como subrayó la agencia EFE, el lanzamiento de Folhaleaks aconteció días después de que denuncias de irregularidades publicadas por el diario condujeran a la destitución del ministro de Turismo, Pedro Novais.
Así como FolhaLeaks, el sitio Localeaks, que recopila información anónima para diversos periódicos americanos, y la Unidad de Transparencia de Al Jazeera también fueron inspirados en WikiLeaks.
