Las conferencias de prensa matutinas del presidente mexicano son parte de una estrategia comunicacional reconocida como “única” no sólo en su país sino en la región. Y aunque surgieron como una promesa de mejorar la transparencia y la comunicación, sus críticos las ven como espacios para atacar a medios, periodistas e incluso difundir desinformación.
Caricaturistas mexicanos usan el humor y la sátira para burlarse de la narcocultura y el crimen organizado en México a través de tiras y cartones políticos, al tiempo que hacen visible la tragedia y el surrealismo del narcotráfico y critican la ineficiencia de las autoridades para combatirlo.
La investigación periodística “Veracruz de los silencios” de la organización Artículo 19 busca respuestas a la pregunta ¿Por qué matan a los periodistas? Para ello el equipo de investigación analizó el asesinato y desaparición de 20 periodistas en el estado mexicano durante 2010-2016 junto con especialista en macro-criminalidad.
El asesinato de una prominente persona no binaria en México dejó ver que la mayoría de medios de ese país no cuentan con protocolos ni herramientas para reflejar en sus notas las realidades de esa población. Según expertos, más allá de hacer buen uso del español, el periodismo debe reflejar la realidad con precisión, pluralidad y respeto a los derechos humanos.
A través de periodismo de datos, efectivas técnicas de entrevista y estrategias innovadoras de difusión, reportajes de investigación de Meganoticias (Chile), Red Es Poder (México) y un equipo de periodistas independientes de Cuba han destacado por dimensionar desde sus países la gravedad de la violencia obstétrica que sufren miles de mujeres en la región.
La periodista mexicana Marcela Turati, quien recientemente lanzó el libro “San Fernando. Última parada”, habló de los desafíos y aprendizajes de investigar por más de una década la desaparición de personas. También dijo lo que considera que los periodistas deberían hacer para cubrir mejor ese crimen.
A un mes del Huracán Otis, periodistas de Acapulco, México, batallan para informar ante falta de infraestructura, daños en equipo y pérdidas personales. Otis vino a agravar la ya crítica situación del periodismo en el estado de Guerrero, y a poner en riesgo a medios locales y reporteros independientes.
El mapa interactivo LupaMundi, de la agencia brasileña de verificación de datos Lupa, arroja luz sobre el estado mundial de las leyes contra la información falsa. Los países de la región en general no cuentan con leyes específicas sobre el tema y académicos advierten sobre el riesgo de una instrumentalización política de la agenda.
Con motivo del Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas, conmemorado el 2 de noviembre, LatAm Journalism Review destaca cuatro casos de periodistas de la región que, en su mayoría, permanecen impunes. Hablamos con periodistas que fueron agredidos, familiares de quienes fueron asesinados por su trabajo y organizaciones que luchan para que los casos sean investigados y juzgados.
El 2 de enero de 2015 el periodista mexicano Moisés Sánchez Cerezo fue secuestrado de su casa por hombres armados. Días después su cuerpo fue encontrado sin vida y con señales de tortura. En estos casi nueve años, su familia se ha dedicado a conseguir justicia con los diferentes gobiernos sin mayor éxito.
La periodista mexicana Alejandra Ibarra propone en su nuevo libro que no es lo que publican los periodistas lo que los hace blanco de asesinatos, sino su liderazgo y toma de postura. También argumentó que los políticos mexicanos ven en el periodismo crítico una osadía y no una función democrática.
Laura Sánchez Ley (México) y Abraham Jiménez Enoa (Cuba) recibieron el premio Periodista del Año, y éste último recibió además un premio a la valentía, en la Cumbre One Young World 2023, en Belfast, Irlanda del Norte. Los periodistas llevaron un mensaje de denuncia por las condiciones del periodismo en América Latina y de apoyo a los colegas en el exilio.