Un policía vestido de civil, con chaleco antibalas, dispara directamente con un arma de fuego. Un casquillo de bala se ve en el aire. El fotoperiodista peruano Iván Orbegoso, en la escena – en la región norteña de La Libertad, en Perú– fotografiando una protesta en contra de la ley agraria, captó este momento decisivo que eventualmente lo llevaría a pedir garantías para su vida.
Policía disparando frontalmente durante manifestación contra ley agraria. (Foto: Iván Orbegoso/La Industria)
A fines del año 2020, la propuesta de una ley agraria que desfavorecía a los trabajadores del campo en Perú desató una serie de protestas en todo el país. La represión policial fue violenta y hubo decenas de heridos y al menos dos muertos en La Libertad.
La foto de Orbegoso fue inmediatamente difundida en redes sociales, diarios nacionales y a nivel internacional por la agencia española de noticias EFE. El fotógrafo tuvo que acudir a las autoridades de su región para pedir garantías para su vida porque empezó a recibir amenazas desde un par de cuentas anónimas en Facebook.
“La policía iba replegando a los manifestantes hasta llevarlos a una parte más alejada, un descampado, donde ya todo era chacra, cerca a la [carretera] Panamericana. Es ahí en donde escuchó los disparos y yo corro y hago la foto”, comentó Orbegoso a LatAm Journalism Review (LJR) sobre el momento en que tomó la polémica foto del policía disparando.
La policía estaba permitiendo transmisiones en vivo, no toma de fotografías, contó el fotógrafo, quien añadió que tanto la policía como los manifestantes eran agresivos con la prensa que estaba en el lugar.
Luego de las amenazas, Orbegoso se vio forzado a cambiar su rutina.
“He tomado todas las precauciones del caso en el sentido de que los lugares, por ejemplo, en donde yo antes solía comer –porque mayormente estoy en la calle–, por ejemplo, ya no voy ahí. O por donde me iba para recoger mi carro para irme a mi casa, ahora cojo otra ruta. Ya no más igual que antes. [...] A veces, sí me da miedo”, dijo Orbegoso.
El 13 de enero, la Asociación de Periodistas del Perú (ANP) denunció las amenazas recibidas contra Orbegoso, al mismo tiempo que la Asociación de Foto Periodistas del Perú (AFPP).
En un primer momento, la prefectura de la región de La Libertad le negó las garantías de protección a Orbegoso, por no poder probar que su vida corría peligro. Sin embargo, luego accedieron y le otorgaron la protección. Zuliana Lainez, secretaria general de la ANP, dijo a LJR que el caso de Orbegoso sienta un precedente importante en Perú.
“Hay varios casos de periodistas en Perú que han sido agredidos. Especialmente cuando se trata de temas de ciberacoso, en los que cuando han ido a la prefectura a pedir garantías, siempre el argumento es el mismo, que como no presentan medios probatorios que demuestren que su vida está en peligro, porque no pueden identificar con nombre y apellido a los agresores, les deniegan las garantías. Por eso lo que ha sucedido con Iván nos va a servir de precedente”, dijo Lainez.
LJR intentó comunicarse con la Prefectura Regional de la Libertad, sin obtener respuesta.
El Ministerio Público logró identificar mediante un peritaje balístico, y a partir de la fotografía de Orbegoso, al suboficial de la policía Víctor Bueno como el responsable de la muerte de un obrero que participó en la marcha de Virú, en La Libertad, el día de la toma de la polémica fotografía, publicó el diario peruano La República.
En una entrevista con El Comercio, el ministro del Interior José Elice dijo que se reuniría con el alto mando de la Policía Nacional del Perú (PNP) para esclarecer lo sucedido entre la policía y los manifestantes durante la protesta en La Libertad.
“Si lo que revela esta fotografía corresponde a la verdad, no solamente se trata de un miembro de la PNP que no debía estar ahí formado de la manera en la que está. Se le ve utilizando un arma de fuego que no corresponde a estas circunstancias”, dijo el ministro según El Comercio.
La foto de Orbegoso ha sido postulada a los Premios Nacionales de Periodismo que convoca el Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS) de Perú y la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en las categorías de Fotografía Periodística y Gran Premio Nacional, dijo a LJR Adriana León, directora del área de libertades informativas de IPYS.
Fotoperiodista peruano Iván Orbegoso siendo llevado a un lado por la policía durante manifestación. (Foto: Renzo Salazar/El Comercio)
Orbegoso sufrió daños a su equipo de trabajo en otra manifestación de la serie de protestas contra la ley agraria que iba a aprobar el gobierno. Renzo Salazar, fotoperiodista de El Comercio, retrató el momento en que Orbegoso fue arrastrado a un lado por la policía.
Salazar, quien suele cubrir manifestaciones, también relató cómo la policía siempre los agrede a pesar de estar identificados como prensa. “Una vez, [en una manifestación] un policía me dijo ‘retrocede o te meto un plomazo’… en ese momento yo perdí toda fe, toda esperanza en esa institución”, dijo Salazar a LJR.
A partir de la violenta represión policial en las manifestaciones de los últimos meses en Perú, la AFPP está organizando una serie de charlas informativas sobre medidas de protecciones para fotoperiodistas.
“En vista de que en las marchas de noviembre la policía había disparado a varios compañeros, nos vimos en la obligación de por lo menos dar una pequeña capacitación para los fotógrafos dentro de la organización”, contó Jose Vidal, presidente de la AFPP a LJR.
Esta primera charla de la AFPP la dio Jesús Olarte de la Agencia France Presse (AFP), en la cual compartió los protocolos de seguridad que tienen los periodistas de agencia a nivel internacional. Entre los consejos dados está el salir en grupo o en pareja a cubrir marchas, usando casco, chaleco de protección, botas altas y mascarilla de gas.
“A partir de noviembre, la cosa sí nos ha hecho reflexionar porque ha habido gente fallecida, porque los disparos de la policía han sido directos”, dijo Vidal.
La Oficina de la Alta Comisionada de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que lidera Michelle Bachelet, dijo en su informe que en las protestas ocurridas entre el 9 y 15 de noviembre, la policía incumplió las normas y estándares internacionales de derechos humanos.
Periodistas y trabajadores de los medios de comunicación fueron afectados por “restricciones, amenazas y ataques”, lo que representó un deterioro de la libertad de expresión, de acuerdo con el informe.
