Por Ingrid Bachmann
Supuestos campesinos armados con fusiles de combate dispararon contra un fotógrafo del diario La Prensa, reportó Proceso Digital. El reportero gráfico, que no fue identificado, cubría la militarización y desarme de la zona del Bajo Aguán, en la costa atlántica de Honduras.
La región ha sido escenario de un litigio de tierras que enfrenta a campesinos, empresarios y el gobierno. Dos semanas atrás, cinco campesinos murieron en un enfrentamiento armado con guardias de seguridad de una finca que, según la policía y los guardias, los labriegos trataron de tomar por la fuerza, explican Rights Action y EFE. Los campesinos, en tanto, alegan que la finca ha sido apropiada ilegalmente por un empresario.
Según El Heraldo, organizaciones campesinas han denunciado un “siniestro plan de desestabilización, persecución, intimidación y aniquilamiento” y rechazaron estar fuertemente armadas, como acusan las fuerzas armadas. El presidente Porfirio Lobo también ha insistido en la necesidad de decomisar las supuestas armas de combate, añade otra nota de El Heraldo.
La Prensa reporta que su fotógrafo fue amenazado y que las imágenes que logró tomar confirman la existencia de grupos con armas prohibidas en la zona. El viceministro de Seguridad condenó el ataque y dijo que era una clara agresión a la libertad de expresión, añade La Tribuna.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.