Un periodista venezolano, que anteriormente había salido del país debido a amenazas, está ahora en una cárcel militar respondiendo a varias acusaciones, rechazadas por defensores de la libertad de prensa.
Otro periodista fue asesinado en Quintana Roo, el tercer profesional de medios muerto en ese estado mexicano en los últimos dos meses. La causa de su muerte aún no es clara, sin embargo, periodistas y organizaciones de medios piden a las autoridades considerar todas las líneas de investigación posibles.
Un juez de migración de Texas negó la fianza al periodista cubano Serafín Morán Santiago quien se encuentra en un centro de detención de ese estado desde el pasado 12 de abril cuando llegó a territorio estadounidense, informó la organización Fundamedios US.
Los dos jóvenes afrodescendientes acusados de asesinar al periodista Ángel Gahona el pasado 21 de abril fueron hallados culpables por el juez Sexto de Distrito Penal de Juicio de Managua, Nicaragua, en la noche del 27 de agosto, informó Confidencial.
El periodista radial brasileño Marlon de Carvalho Araújo, de 37 años, fue asesinado el 16 de agosto dentro de su casa en Riachão de Jacuípe, en Bahía, en la región nordeste de Brasil.
La falta de compromiso por parte de la fiscalías Federal y estatales de México y otras autoridades para seguir las recomendaciones dadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) es la razón de la “impunidad imperante” en los ataques contra periodistas, afirmó la propia entidad en un comunicado.
La Asociación Brasileña de Periodismo Investigativo (Abraji, por su acrónimo en portugués), acaba de publicar un folleto en portugués titulado “¿Cómo lidiar con el acoso contra periodistas en las redes?”.
Un día después de que se cumplieran 19 años del asesinato del periodista colombiano Jaime Garzón Forero se conoció la segunda sentencia condenatoria por su crimen.
La noticia del asesinato del periodista Jaime Garzón Forero el 13 de agosto de 1999 conmocionó a Colombia. En la madrugada de ese día, sicarios acabaron de cinco disparos con la vida de Garzón quien se dirigía en su automóvil a la emisora Radionet, donde trabajaba.
En Colombia, la sociedad civil ha hecho una serie de llamados al Estado para que detenga la oleada de agresiones y amenazas contra periodistas y líderes sociales que en los últimos cuatro años ha cobrado mayor intensidad, de acuerdo con la Fundación para la Libertad de Prensa de Colombia (FLIP).
Los departamentos de Cauca y Valle del Cauca recientemente perdieron en menos de 24 horas a dos de sus periodistas a principios de este mes. Aunque ninguno habría reportado con anterioridad alguna amenaza en su contra, sus muertes se dan dentro de la coyuntura de violencia contra la prensa que afronta Colombia en los últimos años.
El Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) emitió un dictamen en el reconoce la violación de diferentes derechos humanos de la periodista Lydia Cacho por parte del Estado mexicano tras una detención arbitraria ocurrida en 2005.