Autoridades nicaragüenses ya han cerrado, procesado u obligado a exiliarse a medios de comunicación críticos. Según la nueva ley, defensores de derechos humanos advierten que funcionarios podrían acceder a la ubicación, llamadas y el historial de navegación de usuarios de internet.
Legisladores de izquierda y derecha están elaborando leyes de “agentes extranjeros” para, según dicen, proteger la soberanía nacional. Pero estas leyes también amenazan a los medios de comunicación independientes que dependen de la financiación internacional.
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo esgrime una nueva ley de ciberdelincuencia para perseguir a periodistas, incluso en el exilio, facultando a las autoridades para confiscar sus bienes y vigilar a sus familiares en Nicaragua.
El 12 de julio, autoridades nicaragüenses allanaron la vivienda de Tercero y desde entonces se desconoce su paradero. Organizaciones y periodistas exigen que el Estado de Nicaragua responda sobre su caso.
El fenómeno de periodistas en exilio no es nuevo, según la Relatora de libertad de expresión de la ONU, Irene Khan. Sin embargo, el aumento que ha tenido en los últimos años genera preocupación y de allí la necesidad de que tanto Estados como sociedad civil se unan para ofrecer ayuda. Desde América Latina organizaciones se unen a ese llamado.
Ante la propuesta de una nueva ley de telecomunicaciones en Nicaragua, periodistas independientes se preparan para posibles bloqueos de sus sitios web, regulación del contenido audiovisual y control de equipos de producción. Algunos medios ya iniciaron campañas para concientizar a los lectores sobre posibles medidas para esquivar la censura.
El periodista nicaragüense Carlos Fernando Chamorro recibió el premio Pluma de Oro de la Libertad durante el 75 Congreso de WAN-IFRA. Chamorro dedicó el reconocimiento a sus colegas en el exilio y a todos los periodistas latinoamericanos que enfrentan persecución política, la cárcel, y la violencia criminal en sus países.
Directivos de El Faro (El Salvador) y Confidencial (Nicaragua) dijeron que evaluación de riesgos, confianza total entre editores y reporteros, defensa legal y apoyo psicológico son factores básicos para preservar el bienestar y la seguridad de sus equipos ante el hostigamiento y la criminalización.
La situación que viven los periodistas nicaragüenses es una de las peores de la región, y estuvo en el centro del debate, junto a ejemplos de resistencia y perseverancia ante la adversidad, en el panel “Periodismo en Nicaragua”, durante el 17º Coloquio Iberoamericano de Periodismo Digital.
Con sus campañas contra los medios independientes, los gobiernos de varios países de América Latina comienzan a amenazar la libertad de prensa. ¿Puede replicarse el extremo de Nicolás Maduro y Daniel Ortega de bloqueos y cierres de medios?
Cientos de periodistas centroamericanos se han exiliado en Costa Rica por considerarlo un país seguro para el periodismo. Pero la situación ha dado un giro con la disminución de sus índices de libertad de prensa y seguridad. Algunos exiliados han decidido buscar rumbo en otras naciones y dejar el periodismo.
Se cumple un año del destierro de Nicaragua del periodista Miguel Mendoza, y otros 221 presos políticos. Desde su nuevo hogar en Estados Unidos, Mendoza habla sobre las secuelas de su encierro y exilio, así como de su trayectoria y la mención especial del Premio Cabot.