Además de los al menos 12 periodistas heridos durante la cobertura de las protestas en Asunción, Paraguay, el pasado fin de semana, los medios también han enfrentado ataques por parte de algunos dirigentes pro Gobierno que los acusan de fomentar la violencia en el país.
La más reciente fue la hecha por el oficialista Partido Colorado que en un comunicado llamó “mercaderes de la mentira disfrazados de periodistas” a tres presentadores del canal Telefuturo, reportó el portal Última Hora. En el comunicado también los acusó de “engañar” y “azuzar” con “desinformación” a los ciudadanos que se “oponen a que el pueblo soberano decida”, agregó.
Según Última Hora, ante el señalamiento, una de las presentadoras acusó por su parte al presidente del país, Horacio Cartes, así como a otros dirigente de ser los responsables de lo que sucede en Paraguay por promover la aprobación de una enmienda que permitiría la reelección de Cartes en 2018.
Precisamente fue la aprobación de esta enmienda por un grupo de 25 senadores el pasado 31 de marzo lo que ocasionó las protestas. De acuerdo con el New York Times, los senadores que la aprobaron se reunieron “fuera del pleno, en una sesión paralela casi secreta”.
Tras conocerse esta aprobación, los senadores opositores salieron a las calles en señal de protesta, mientras que los cientos de manifestantes que se encontraban a las afueras del palacio legislativo tumbaron las vallas de seguridad lo que permitió la entrada de algunos de ellos al Congreso. Mientras que otros manifestantes se enfrentaban a la policía en las calles, agregó el New York Times.
Posteriormente, el edificio del Congreso comenzó a arder en llamas, informó CNN en Español.
Ese mismo día, los medios recibieron la primera acusación de provocar la violencia, esta vez de parte del mismo presidente Cartes quien emitió un comunicado para hacerlo.
“El incendio generado en la sede del Congreso Nacional demuestra, una vez más, que un grupo de paraguayos empotrados en la política y en medios masivos de comunicación, no escatimarán esfuerzos para lograr el objetivo de destruir la democracia y la estabilidad política y económica del país”, señaló el presidente según un comunicado con fecha del 31 de marzo.
Y es que las protestas que comenzaron la noche del 31 de marzo hasta la mañana del 1 de abril en Asunción dejaron como saldo una persona muerta, decenas de heridas y 217 detenidas (hasta la medianoche del 31 de marzo).
Entre los heridos se cuentan al menos 12 trabajadores de la prensa, según cifras del Foro de Periodistas Paraguayos (Fopep) publicadas por el diario ABC Color.
Ante el comunicado del Presidente del 31 de marzo, Fopep le exigió a las autoridades proteger el trabajo de la prensa, y las culpó de lo que suceda con ellos.
“Exhortamos a las autoridades a salvaguardar la integridad de los colegas comunicadores en un contexto en el que el propio presidente Horacio Cartes responsabiliza a los medios de generar este clima de crispación. Sin embargo lo consideramos como único responsable de haber provocado esta situación por su insistencia de violar la Constitución Nacional”, dijo Fopep en un pronunciamiento, según publicó ABC Color.
De acuerdo con Fopep, gran parte de los periodistas recibieron heridas por gomas de bala disparado por la policía, pero también se presentaron otros tipos de agresiones como destrucción de los equipos de trabajo. El Diario Popular y Telefuturo reportaron daños en sus vehículos, así como en sus equipos. El diario ABC Color reportó que su sede sufrió daños.
Datos en los que concuerda el Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), el cual sin dar cifras específicas, señaló que “varios” comunicadores denunciaron haber sido golpeados con puños, cachiporras y balines de goma, así como la destrucción de sus equipos. Según el SPP, estas agresiones se presentaron debido a la “indiscriminada intervención policial”.
El SPP repudió estos ataques e hizo un “llamado a las autoridades de la República a fin de apearse de sus ambiciones políticas personales y [anteponer] los supremos intereses del conjunto de la sociedad evitando que esta crisis desemboque en una insostenible ola de violencia”.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó los hechos de violencia e instó al Estado a cumplir con sus obligaciones de garantizar los derechos humanos entre ellos el de la libertad de expresión.
Para que la enmienda sea aprobada debe lograrlo también en la Cámara de Diputados. No obstante, el presidente de esta Cámara ha dicho que por ahora no van a discutir el tema “hasta tanto se concrete la mesa de diálogo entre los que buscan la reelección y los opositores”, según ABC Color.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.
