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Periodistas centroamericanos debaten sobre periodismo y resistencia en medio del retroceso democrático

Ante el auge del autoritarismo y el declive de la libertad de prensa en Centroamérica, periodistas e investigadores han reconocido la urgente necesidad de colaboración.

Durante un seminario web el 3 de diciembre de 2025, organizado por el Centro Knight para el Periodismo en las Américas, en el cual se exploró la situación del periodismo centroamericano en medio del retroceso democrático, los efectos de la represión y los esfuerzos para superarla dominaron la conversación.

“Es posible hacer buen periodismo contra viento y marea, contra las condiciones horribles que muchas veces se están viviendo en algunos de estos países”, dijo el académico mexicano Manuel Alejandro Guerrero.

Guerrero estuvo acompañado por el periodista guatemalteco Daniel Villatoro; Maryorit Guevara, fundadora y directora de La Lupa de Nicaragua; y Sergio Arauz, subdirector de El Faro, de El Salvador. Summer Harlow, directora asociada del Centro Knight, moderó el evento.

El seminario web contribuyó al lanzamiento de un nuevo ebook“Periodismo en Centroamérica frente al retroceso democrático”, publicado por el Centro Knight en colaboración con Estudio Abierto.

“Yo creo que es un momento crítico y, para mí, el gran problema que tenemos ahora es que hay dos fenómenos paralelos”, dijo Villatoro, coautor del ebook y director de Estudio Abierto.

El primero, explicó, es la transformación de los modelos de negocio tradicionales de los medios de comunicación y el auge de la tecnología. El segundo es la prevalencia de los ataques políticos.

El libro examina las perspectivas de los periodistas, así como las redes de apoyo al periodismo, en Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua. Se centra especialmente en las mujeres, los periodistas comunitarios y los miembros de la comunidad LGBTIQ+.

Además de las entrevistas, los autores analizaron el entorno mediático, político y legal de cada país.

Guerrero, también coautor del libro, explicó que el estudio adopta una perspectiva sistémica y estructural de la región, pero también intenta analizar cada país individualmente.

Por ejemplo, señaló que Honduras se enfrenta a un colapso institucional, por lo que la violencia contra los periodistas puede provenir de cualquier parte: grupos criminales, el gobierno o cualquier otro actor. Mientras tanto, en Guatemala, un presidente que expresa preocupación por los derechos humanos se enfrenta a intereses conservadores sin incentivos para respetar las libertades de prensa y expresión.

“Encontramos que [normalmente] se habla de América Central como una región, y tiene problemáticas muy concretas que la gente que practica el periodismo en estas regiones lo sabe”, dijo. “Está consciente de estas distancias y diferencias. No es lo mismo hacer periodismo en Honduras que en Guatemala, que Nicaragua, que en El Salvador”.

Libertad de prensa en Centroamérica

Guevara es una de los 268 periodistas nicaragüenses que se estima que se encuentran en el exilio.

“En el caso de Nicaragua, hacer periodismo es imposible estando dentro de Nicaragua”, dijo. “No existe un periodismo libre en Nicaragua. Lo que hay es persecución, criminalización, confiscaciones y cárcel en contra de las y los periodistas independientes”.

En Nicaragua, dijo, existe un aparato de propaganda bajo el régimen del matrimonio formado por el presidente Daniel Ortega y la copresidenta Rosario Murillo.

Sin embargo, incluso antes de que el gobierno comenzara a cerrar y confiscar medios de comunicación en abril de 2018, y a encarcelar a periodistas, la libertad de prensa ya se encontraba bajo ataque en Nicaragua.

“No hay tampoco acceso a fuentes oficiales desde 2007, cuando retornó Daniel Ortega al poder”, dijo. “Rosario Murillo anunció que iba a promover una comunicación incontaminada, y eso significaba que fue limitando las declaraciones, las ruedas de prensa para las y los periodistas”.

Ahora, Nicaragua se sitúa junto a Venezuela y Cuba como el país latinoamericano con más periodistas exiliados, algunos de los cuales continúan con su trabajo.

“El periodismo que hay está en resistencia, es un acto de resistencia cívica que hacemos, de informar a una ciudadanía que está con miedo, pero que necesita más que nunca de esta información”, dijo.

Arauz, quien preside la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES), analizó la transformación que ha experimentado su país en los últimos 12 meses.

“Este año en El Salvador, sí cambiaron las cosas de forma muy dramática y de forma imprevista para muchos de los periodistas”, dijo Arauz. Al igual que él, al menos 53 periodistas del país se han visto obligados a exiliarse este año.

“El perfil del periodista que se está exiliando es el periodista que tiene que decidir entre dos cosas, o quedarse callado, autocensurarse, o seguir ejerciendo su trabajo sin el temor a las repercusiones. Y en ese sentido, optar por tratar de mantenerse vigente como periodista haciendo su trabajo desde fuera o desde donde pueda”, dijo.

Los periodistas que trabajan para exigir cuentas al poder o quienes realizan investigaciones complejas y exhaustivas, especializados en temas como el medio ambiente, el género o la verificación de datos, se han visto particularmente afectados, dijo.

Algunos fueron espiados con el programa espía Pegasus y otros se han marchado debido a los rumores de que serían encarcelados tras publicar importantes investigaciones. Medios de comunicación y asociaciones de periodistas también se vieron obligados a irse.

Quienes se quedaron trabajan en condiciones precarias.

“Cuando digo ‘precarias’, hablo de [vivir] con miedo, con visitas de policías a sus casas, con controles que no habían existido en los últimos 35 años”, dijo Arauz. “Creo yo que por eso la academia y este tipo de estudios aportan bastante. [Los periodistas viven] una crisis general del oficio y de los medios que no terminamos de entender”.

Arauz señaló la necesidad de investigar cómo los periodistas en el país continúan realizando su trabajo, especialmente cuando los medios que reciben financiación internacional se ven restringidos por la nueva Ley de Agentes Extranjeros. Otros medios de comunicación, como la televisión o la radio, no tienen la opción de irse porque su concesión está vinculada al país, explicó.

Cómo trabajar desde el exilio

Una vez que salen de casa, los periodistas nicaragüenses que trabajan en medios digitales desde el exilio se enfrentan a bajos salarios y dificultades para mantener sus proyectos, dijo Guevara. Hacer periodismo a distancia también se ve dificultado por la persecución transnacional de la prensa y las fuentes.

Un informe reciente de la Asociación de Periodistas y Comunicadores Independientes (PCIN) de Nicaragua señaló un aumento en la percepción de inseguridad y el temor entre los periodistas de ser víctimas de la represión gubernamental, incluso en el exilio. Esto, agregó el informe, principalmente, tras el asesinato en junio del oficial retirado del ejército, y crítico de Ortega,  Roberto Samcam, en Costa Rica.

Para continuar trabajando en el exilio, Guevara explicó que primero prioriza el rigor y los elementos básicos del periodismo, y luego busca la colaboración entre medios y periodistas, no solo de Nicaragua, sino de la región en general.

Arauz dijo que ha recibido consejos de colegas de Nicaragua, Venezuela y Cuba sobre cómo hacer periodismo desde el exilio y, en particular, cómo sobrevivir. También enfatizó la importancia de la colaboración como algo “que esté apegado”, y que debería surgir de forma natural, con base en intereses mutuos.

Siguiendo adelante

Además de analizar las tragedias y los desafíos que enfrenta la prensa centroamericana, Villatoro destacó los logros en narrativa e investigación de los periodistas de la región.

“Ese nivel de talento existe en Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua”, enfatizó.

Además, mencionó a asociaciones de periodistas, como APES, PCIN, No Nos Callarán (Guatemala) y la Red Centroamericana de Periodistas, que trabajan a nivel nacional y regional para resistir y promover la solidaridad.

Los periodistas y autores reunidos en el seminario web también abordaron otros factores que afectan al periodismo en la región y en cada país.

Discutieron cómo los medios utilizan y deberían utilizar la inteligencia artificial, así como las posibles amenazas que representan para el periodismo los grandes modelos de lenguaje (LLM).

Hablaron sobre la credibilidad y cómo comunicar el valor del periodismo a las audiencias en contextos donde proliferan la desinformación y las mentiras.

Finalmente, ofrecieron consejos sobre cómo los colegas en países autoritarios pueden prepararse para lo que pueda venir, especialmente si llega el momento de partir.

Observa estas conversaciones y el seminario web completo gratuitamente en la página de YouTube del Centro Knight.

 

Este artículo fue traducido con la ayuda de IA y revisado por César López Linares.

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