La Policía Civil del Estado de Goiás entregó a la justicia brasileña el 4 de abril la investigación finalizada sobre el asesinato del periodista radial Jefferson Pureza, muerto en la ciudad de Edealina el 17 de enero de este año. La investigación policial concluyó que el concejal José Eduardo Alves da Silva, del Partido de la República (PR), fue quien ordenó el crimen y debe ser acusado por homicidio doblemente calificado, por motivo fútil y por haberlo pagado, según reportó G1.
Además de Alves da Silva, también fueron acusados otros dos hombres y tres adolescentes – dos de los adolescentes habrían cometido el crimen, invadiendo la casa de Pureza y disparando los tres tiros que lo mataron, concluyó la investigación.
Según lo que le oficial de policía Queates Lourdes Barreto Silva le dijo al G1, el político estaba disgustado con el periodista por las críticas hechas en su programa de radio. Sin embargo, el desencadenante del asesinato fue el descubrimiento de que Pureza estaba involucrada con la exesposa del concejal, dijo Barreto Silva.
“Él planeó matar al radialista a principios del año pasado, pero eso no se concretó en la época”, dijo el oficial. “A partir del momento en que [el concejal] descubrió la relación contactó a dos mayores y a un menor quienes lo llevaron hasta los dos adolescentes que fueron pagados para ejecutar el homicidio”, afirmó y agregó que el concejal también planeó el asesinato de la exesposa, que no se concretó.
Los dos adolescentes habrían recibido 5 mil Reales (cerca de US $1.478) y el arma usada en el crimen para asesinar al radialista, reportó G1. Ellos y otro adolescente que habría intermediado la negociación del crimen, según la Policía, deben responder por acto infractor análogo al homicidio.
El agricultor Marcelo Rodrigues dos Santos y el empresario Leandro Cintra da Silva, que según la policía intermediaron la negociación entre el concejal y los adolescentes para cometer el delito, deben responder por el homicidio y corrupción de menores, informó G1.
El concejal y los otros sospechosos fueron arrestados el 9 de febrero por presunta participación en el asesinato. Todavía están en prisión y, según el oficial, niegan la autoría del crimen, según lo informado por Jornal Opção. “Las investigaciones concluyeron que el crimen tenía motivaciones políticas y pasionales. Ninguno de los acusados incluso confesó el crimen, pero la policía no tiene dudas de que estas personas estuvieron directamente involucradas en el asesinato”, dijo Barreto Silva.
Jefferson Pureza presentaba el programa “A Voz do Povo” (La voz del pueblo), en la radio Beira Rio FM, en el que denunciaba presuntas irregularidades en la administración pública y criticaba a las autoridades municipales y regionales. Según lo dicho por sus amigos a la prensa en el momento del asesinato, el periodista había recibido amenazas por su trabajo durante al menos dos años. Cuando fue asesinado, Pureza estaba trabajando para reconstruir la estación de radio que transmitía su programa que había sido destruido por un incendio en noviembre de 2017 – el segundo en menos de un año.
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.
