La segunda red social más popular para el consumo de periodismo en Brasil, WhatsApp se ha convertido en el foco de la estrategia de distribución de medios nativos digitales en el país, que ven una oportunidad de establecer una conexión directa con el público sin depender del algoritmo de otras plataformas.
El director adjunto del diario español conversó sobre el éxito del modelo de suscripciones digitales del periódico, que se perfila a alcanzar 200 mil suscripciones en dos años. También habló del nuevo proyecto gráfico del sitio web y del rol de los podcast en el acercamiento entre lectores y periodistas.
Representantes del Sahan Journal y el Chicago Sun-Times compartieron en ISOJ cómo sus medios han aplicado el modelo no lucrativo para ofrecer periodismo de calidad, mientras que las organizaciones Venetoulis Institute for Local Journalism y Houston Endowment contaron por qué están financiando iniciativas de periodismo local.
April Brumley Hingle, directora de recursos financieros de The Texas Tribune, y Janine Warner, cofundadora de SembraMedia, conversaron en ISOJ 2022 sobre suscripciones, eventos, productos y consejos sobre cómo diversificar los ingresos de los medios periodísticos.
Headline tiene la intención de transferir hasta el 70 por ciento de sus ingresos totales, a través de suscripciones y licencias de contenido, a periodistas y organizaciones independientes que se sumen a la plataforma.
On average, one media outlet was discontinued per month in Brazil this past year. Altogether, 12 outlets ended their journeys in the country's press throughout 2021, according to a survey carried out by Portal Comunique-se.
Un reciente informe de SembraMedia apunta que en 2019 las subvenciones superaron a todas las otras fuentes de financiamiento de medios y pasaron a representar 29% de los ingresos de medios en la región; en 2020 la cifra llegó a 37%.
En ausencia de políticas públicas específicas para financiar actividades periodísticas, medios pequeños de Brasil hacen uso de convocatorias a fondos para proyectos culturales para obtener recursos. El país tiene una larga tradición de financiar actividades culturales con recursos públicos, y periodistas y expertos abogan por el mismo acercamiento al periodismo para luchar contra la desinformación y los desiertos de noticias.
Un grupo de estudiantes lanzó, mientras seguían en la universidad y con solo R$ 200 (US$ 36), Tatu, una agencia de periodismo de datos especializada en la cobertura del estado de Alagoas. Hoy la startup cuenta con ocho empleados, con apoyo económico y busca ampliar su cobertura.
Cuando se anunció el regreso de la revista Cambio, anteriormente un referente del periodismo de investigación en Colombia, generó un debate en torno a la libertad de prensa y la situación de los medios en el país.