Por Heloisa Aruth Sturm y Teresa Mioli
Dos periodistas colombianos que fueron secuestrados en mayo por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) han recibido amenazas a través de mensajes de texto enviados supuestamente por el ELN, de acuerdo con un reportaje de la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP).
El periodista Diego D'Pablos recibió recientemente un amenazador mensaje de texto en su celular que decía que tanto él como su colega Carlos Melo, periodista de Noticias RCN, habían sido declarados objetivos militares. Al inicio del mensaje dice "Manuel Guevara del Frente Héctor del ELN".
D'Pablos y Melo, junto con la periodistas colombiana española Salud Hernández-Mora fueron secuestrados por el ELN en mayo de 2016. Luego de ser liberados, el ELN dijo respetar la libertad de expresión.
RCN le preguntó al Comando Central del ELN por la veracidad de esta amenaza y urgió al Gobierno a investigar el caso.
Guillermo Rivera, actual ministro del Interior, dijo que era muy probable que dichas amenazas provengan del ELN, al tiempo que aseguró que los periodistas serán protegidos por el Gobierno.
"El Gobierno cree que lo más probable es que esas amenazas provengan del ELN, sin embargo, estamos a la espera de que las autoridades competentes señalen claramente de dónde provienen esas amenazas, pero provengan de donde provengan el Gobierno las rechaza categóricamente, y ya ha tomado decisiones para brindarles de manera inmediata medidas materiales de protección a los periodistas", dijo Rivera, según RCN.
No obstante, fuentes oficiales entrevistadas por RCN Radio dijeron que las investigaciones preliminares demostrarían que las intimidaciones que recibieron los periodistas no poseen los elementos que usualmente utiliza ese grupo guerrillero para amedrentar a sus víctimas.
A través de la cuenta de Twitter de la estación de radio del ELN, el grupo guerrillero negó estar involucrado en el caso. "El ELN desmiente públicamente a personas que de manera cobarde y a nombre de nuestra organización amenazan a Diego D'Pablos y Carlos Melo", publicó el ELN en Twitter.
Amnistía Internacional urgió a las autoridades colombianas a investigar a fondo los hechos para determinar a los verdaderos autores de estas amenazas, y advirtió que esto podría afectar las conversaciones de paz del país.
Según Amnistía, la amenaza de muerte "no ayudará a hacer avanzar las estancadas conversaciones de paz entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN)".
"Estas amenazas solo sirven para menoscabar la valiosa labor de los periodistas en Colombia, que son desde hace mucho objeto de abusos y violaciones de derechos humanos a manos de todos los actores del prolongado conflicto armado del país, incluidos las fuerzas de seguridad, los paramilitares y los grupos guerrilleros", argumentó la organización.
La FLIP, junto a otras organizaciones a favor de la libertad de expresión, rechazó y lamentó la "pasividad de las autoridades para terminar con este riesgo" e hizo un llamado al Gobierno para que garantice la seguridad de los periodistas y redoble los esfuerzos para acabar con la impunidad en el país.
"La impunidad crea un clima de permisividad a las acciones de violencia y censura, como el mensaje amenazante enviado a los periodistas de RCN", declaró la organización. Agregó que "el hostigamiento al que están siendo sometidos los periodistas Diego D'Pablos y Carlos Melo es una violación a la libertad de prensa, que inició con el secuestro y se incrementa con esta amenaza".
A pesar de las amenazas recibidas, D'Pablos dijo que no dejará el país. "Vamos a seguir aquí. No nos van a intimidar porque no hemos hecho nada malo y vamos a seguir trabajando y haciendo nuestra labor", dijo el periodista colombiano al ser entrevistado por la Associated Press (AP).
Nota del editor: Esta historia fue publicada originalmente en el blog Periodismo en las Américas del Centro Knight, el predecesor de LatAm Journalism Review.