Al finalizar el 23 de abril su Reunión de Medio Año, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) concluyó que las principales dificultades con la prensa americana surgen de “crímenes contra periodistas y gobiernos arbitrarios e intolerantes”.
La SIP criticó la situación de la prensa en varios países latinoamericanos, señalando que ha habido ya tres periodistas asesinados en Brasil y uno en Haití este año y que 20 periodistas han sido asesinados en Honduras en los dos últimos años donde el gobierno fue criticado por usar “escasos esfuerzos” para tratar de resolver aquellos crímenes.
México fue criticado también por tener 29 agresiones contra periodistas y dos atentados contra medios por parte del crimen organizado y de funcionarios corruptos, lo cual es “el peor obstáculo para la prensa”, añadió la SIP. La impunidad que existe en estos casos “sigue siendo el aspecto más dramático de este problema”, señaló el diario mexicano Vanguardia.
Pero sobre todo a la situación en Venezuela, Ecuador, Argentina, Bolivia y Nicaragua fue criticada por la SIP debido a sus respectivos gobiernos “a manos de presidentes arbitrarios e intolerantes que buscan acallar a la prensa crítica”.
El gobierno de Argentina fue criticado por negarse a sancionar dos leyes que otorgarían transparencia, “una sobre acceso a la información pública y otra para regular la publicidad oficial”. Argentina y Nicaragua también fueron criticados por tener un gobierno que repetidamente “castiga a los medios críticos con la pauta oficial”.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, fue criticado por amenazar constantemente con regular la Ley de Imprenta, la cual regularía a los medios de comunicación. La SIP también señaló su preocupación por las varias agresiones a periodistas y medios de comunicaciones bolivianos que siguen sin ser investigadas.
La tensa situación que existe entre la prensa y el gobierno de Ecuador también fue destacada por la SIP, ya que el presidente ecuatoriano Rafael Correa “insiste en que la información es un servicio público y, por lo tanto, debe ser administrada por el Estado”. La futura Ley de Comunicación fue calificada como “la mayor amenaza” en el país. Esta ley ha sido criticada por varias razones, entre ellas por discriminar contra medios privados y por la creación de un Consejo de Comunicación que incluiría representantes del gobierno.
Los atentados contra la libertad de expresión en Venezuela también son varios, la SIP recalcó. Sobre todo, el gobierno “mantiene una inmensa red de medios gubernamentales financiada con fondos públicos”, señaló la SIP. La SIP exigió al gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, que respetará los derechos humanos y la integridad de los periodistas, según reportó el noticiero venezolano El Impulso.
En fin, la SIP alertó que “la libertad de expresión en Latinoamérica atraviesa un panorama sombrío", reportó la agencia de noticias Efe, no solo por los múltiples problemas a raíz de gobiernos autoritarios, pero también porque “muchos de los crímenes de periodistas no son suficientemente investigados y los casos languidecen por años sin que nadie se responsabilice", añadió Efe.
La SIP también señaló que en Latinoamérica corre el riesgo de la censura ya que la autocensura y “la ‘difamación oficial’ de periodistas críticos” siguen aumentando, reportó el noticiero salvadoreño La Prensa Gráfica.