El cierre de emisoras radiales en Venezuela sigue en aumento. Radio Caracas Radio (RCR) cierra definitivamente después de que su apuesta por transmitir en YouTube no funcionara y Éxtasis 97.7 FM, en Táchira, fue obligada a apagar sus equipos luego de ser revocada su concesión del uso del espacio radioeléctrico.
Tras casi 27 años de vida, el diario guatemalteco elPeriódico anunció su cierre en medio de denuncias de persecución por parte del gobierno. Su presidente y fundador ha cumplido casi 10 meses de prisión tras ser arrestado por cargos muy criticados.
Venezuela ha sido sometida a un desmantelamiento de su ecosistema de medios de comunicación, en las últimas décadas. Durante el año 2022, se ha registrado el cierre de al menos 95 estaciones de radio en el país, siendo el estado Zulia el más afectado. Estos cierres deterioran gravemente el derecho a saber de la ciudadanía y las condiciones para ejercer periodismo.
Periodistas de Honduras, El Salvador, Nicaragua y Venezuela hablaron durante un panel del webinar “Periodismo en tiempos de polarización y desinformación en América Latina” sobre la situación de la libertad de prensa en medio de gobiernos cada vez más autoritarios y cómo han logrado seguir haciendo periodismo.
El Buenos Aires Herald, el periódico de habla inglesa de la capital argentina, cerró tras 140 años de impresión.
Después de diez años de producir periodismo investigativo reconocido en todo el mundo, la revista mexicana Emeequis anunció el fin de su publicación.
El nuevo Ministro de Comunicaciones de Trinidad y Tobago dijo a un grupo de periodistas del Caribe que el gobierno había utilizado demasiado dinero para financiar las empresas de medios estatales.
Ante el peligro inminente de ser cerrada por el Gobierno ecuatoriano, una de las pocas voces que monitorea la libertad de expresión y la situación del periodismo en ese país hace esfuerzos por seguir trabajando.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) llamó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos a emitir un fallo en contra del Estado venezolano por cerrar de forma ilícita el canal de televisión RCTV en 2007.
Pese al rechazo de los trabajadores —que han llegado hasta la justicia para revertir la decisión— todo parece indicar que el gobierno chileno terminará por deshacerse de lo que queda del diario La Nación, que es 69% propiedad del Estado.