Luego del asesinato del fotoperiodista mexicano Edgar Esqueda en San Luis Potosí, el pasado octubre, se dilvugó en internet un video de teléfono celular que fue enviado a un expolicía. En el video se ve a Esqueda, atado y de rodillas, dando los nombres de los reporteros que cubren asuntos criminales en los diarios de todo el estado. En respuesta, el gobernador de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras ordenó medidas de protección inmediatas - una patrulla policial para cada reportero mencionado en el video.
El Tribunal de Justicia de São Paulo (TJ-SP) negó en segunda instancia el día 29 de noviembre el recurso presentado por el fotógrafo brasileño Sérgio Silva en el cual pedía una indemnización al Estado por perder el ojo izquierdo tras ser impactado por una bala de goma mientras cubría una protesta en São Paulo, el 13 de junio de 2013.
Después de casi cuatro años de que la Asamblea General de la ONU declarara el 2 de noviembre como el Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas (IDEI, por sus siglas en inglés), la fecha se ha convertido en un día para que profesionales de los medios y grupos de libertad de expresión en América Latina y el resto del mundo llamen la atención sobre los niveles de violencia e impunidad que afecta a sus colegas.
A lo largo de 14.800 kilómetros y cuatro meses, los reporteros Bob Fernandes y Bruno Miranda visitaron cuatro estados brasileños para descubrir quién tiró del gatillo y quien mandó disparar los 36 tiros que mataron a seis periodistas brasileños en casos icónicos para la prensa del país.
El proyecto “Forbidden Stories”, lanzado por las organizaciones Reporteros Sin Fronteras (RSF) y Freedom Voices Network (Red de Voces por la Libertad) este 31 de octubre, pretende proteger las “historias prohibidas” de periodistas que están en riesgo o bajo amenaza por hacer su trabajo: informar.
México y Brasil se encuentran entre los países que registraron un mayor aumento en las tasas de impunidad en los casos de asesinatos de periodistas en los últimos 10 años, de acuerdo con el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) y su 10º Índice Global de Impunidad.
Un camarógrafo que denunció haber recibido amenazas de muerte fue asesinado en el oeste de Honduras el 23 de octubre.
El caso de la periodista colombiana Claudia Julieta Duque, quien fue perseguida y torturada psicológicamente en 2001 y 2004, fue calificado por la Fiscalía General de la Nación como un crimen de lesa humanidad.
Una corte de Guatemala sentenció a Sergio Waldemar Cardona Reyes a 30 años de cárcel por el asesinato en 2015 del periodista Danilo López.
La Policía Nacional de Colombia está siendo señalada como la posible responsable de dos ataques a la libertad de prensa ocurridos en lugares diferentes este domingo 8 de octubre.
El fotoperiodista Edgar Daniel Esqueda Castro fue encontrado muerto el 6 de octubre en San Luis Potosí, en el centro de México, un día después de haber sido secuestrado por hombres que presuntamente se identificaron como policías.
“Son 17 años de esta cuenta roja en la que no se ha dejado de contar periodistas asesinados. Son 109, y una buena parte de ellos en las últimas dos administraciones”, dijo Daniela Pastrana, directora de la organización Periodistas de a Pie. “Pero empezó la cuenta cuando paradójicamente empezó la transición democrática. Esa es una de las cosas que yo todavía no me termino de explicar”.